La próxima campaña algodonera en la provincia de Santa Fe podría sufrir una drástica reducción del área sembrada si las condiciones climáticas y de mercado actuales no mejoran. Desde la Asociación para la Promoción de la Producción Algodonera (APPA) estiman que la reducción podría ser del 40%. Al mismo tiempo reclaman al gobierno santafesino que modifique las condiciones establecidas para otorgar los subsidios a los algodoneros perjudicados durante la última campaña.
De las 14.000 has de algodón que se sembraron en Santa Fe durante la campaña 2004/05 sólo 8.000 se mantendrían, según los cálculos realizados por Carlos Sartor, presidente de APPA. Las causas -explicó- hay que buscarlas en factores climáticos, de mercado y en el antecedente de la última cosecha. Las bajas temperaturas obligan a retrasar las labores que debieran iniciarse en los próximos 15 días. Pero también continúa la nula rentabilidad que provocó el quebranto de los productores durante el ciclo pasado.
La tendencia que se observa entre los productores es la de suplantar el algodón con girasol. El fracaso de la última cosecha obligó al gobierno santafesino a socorrer a los productores con un subsidio. Pero, según explicó Sartor, ahora surgió una discrepancia en la interpretación del mismo porque el gobierno exige que esos recursos se vuelquen en la compra de insumos para la próxima campaña. La APPA tomó contacto con legisladores del norte santafesino con el fin de que intercedan ante el gobierno de la provincia. “Hoy la tonelada de fibra vale $ 720 y sólo de cosecha el gasto es de $ 450; a eso hay que sumarle los insumos, por lo que el cultivo no es rentable”, remató Sartor.
Juan Manuel Fernández
Corresponsal de Infocampo en Santa Fe