El presidente de la Cámara de Diputados del socio mayoritario del Mercosur, Severino Cavalcanti, formuló el anuncio para los arroceros brasileños, tras reunirse con el ministro de Hacienda, Antonio Palocci.
Según el parlamentario, Palocci se comprometió a destinar 450 millones de reales (unos 187,5 millones de dólares) para adquirir a precios de compensación el arroz que los productores brasileños no consigan colocar en el mercado este año.
Según se informó, el producto lo comprará la Compañía Nacional de Abastecimiento, lo almacenará en los silos oficiales y lo utilizará para regular los precios.
Las existencias se guardarán mientras los precios se mantengan bajos y se sacarán al mercado cuando comiencen a subir, según explicó el legislador.
Según datos del Ministerio de Agricultura, Brasil producirá este año cerca de 12,9 millones de toneladas de arroz para atender un consumo calculado en 12,6 millones de toneladas.
El excedente, sin embargo, llegará a 1,6 millón de toneladas debido a que, atraídos por los bajos precios del producto argentino y uruguayo, los comerciantes planean importar este año 1,3 millón de toneladas.
Los productores brasileños alegan que, ante el ingreso de arroz más barato, los precios internos cayeron a niveles inferiores a los costos de producción.
El pasado martes, un grupo de arroceros paralizó una de las principales carreteras del sur del país en protesta contra las importaciones de ese grano y para presionar al gobierno para que adquiera parte de su producción.
Los arroceros brasileños llegaron a bloquear las fronteras para impedir el ingreso al país de camiones cargados con arroz argentino y uruguayo, pero, ante las protestas de los gobiernos vecinos, la policía tuvo que intervenir para garantizar el libre tránsito.