La administración de Lula D Silva comunicó que el Gobierno de Brasil invertirá más de 4.700 millones de reales, que equivalen a unos U$S 1.000 millones, para mejorar las rutas por las que salen los granos y otros productos agroindustriales, de manera de apuntalar a la producción agropecuaria y mejorar la competitividad.
Significa un incremento del 34% en los fondos apuntados a estas obras viales, ya que en 2023 se ejecutaron mejoras por unos 3.500 millones de reales.
“El precio está directamente relacionado con los costos de envío. Si no tuviéramos estas condiciones de las carreteras, la soja seguramente estaría por debajo de los costos de producción”, destacó Carlos Favaro, el ministro de Agricultura.
Además expresó que “en Brasil, nada aporta más competitividad a la agricultura que la infraestructura logística”.
“Transportes más eficientes, con modos integrados, con puertos que aporten fluidez, eso se traduce en ingresos, en la capacidad de ganar mercados cada vez más exigentes y competitivos”, remarcó.
“RUTAS AGROPECUARIAS”: EL PLAN DE BRASIL
Según explicaron desde el Palacio del Planalto, la gran meta es que el 80% de todas las rutas del país alcancen la categoría de “buen estado”.
Para ello, desde el Gobierno de Lula planificaron dividir en dos grandes partes las más de 60 obras que consideran “estructurales”.
Las inversiones se dividirán entre los llamados “Arco Norte” y “Arco Sur-Sudeste”:
- En el primero, que contempla a los estados del norte y el nordeste del país, pasará de los 2.000 millones de reales del año pasado hasta un aporte final que será de 2.660 millones de reales este año.
- En tanto que para la segunda división, que comprende al sur, sudeste y centro oeste de Brasil, los 1.500 millones de reales de 2023 serán superados por 2.050 millones este año.
El plan para el agro “mais grande” en la historia de Brasil: Lula inyecta U$S 76.000 millones
Mediante este método Lula busca Invertir en mejorar la red vial para reducir los costos de transporte y aumentar la competitividad de Brasil en la producción de granos, a través del crecimiento del 30% en el destino de recursos públicos para estos ítems.
“El límite de gasto transformó a Brasil en el país que menos invirtió entre todas las economías relevantes. Si se invierte poco, obviamente la infraestructura empeora. Ahora está mejorando nuevamente, pero todavía está recuperando pasivos de los últimos años”, sostuvo el ministro de Transportes, Renan Filho.
¿A qué se refieren con “límites de gasto”? A un concepto que fue creado en 2016 durante el gobierno de Michel Temer, y que sujetó el gasto público a la performance de la lucha contra la inflación.