BASF se unió al Foro de Aceite de Palma Sustentable (FONAP) como productor de oleoderivados en la categoría “Promotor”. “Convertirse en un promotor oficial de FONAP es una señal importante para BASF en sus esfuerzos continuos para fomentar productos sustentables de aceite de palma. Esto destaca nuestro compromiso de transformar el mercado hacia recursos renovables sustentables y ayudar a nuestros clientes a cumplir sus compromisos con el FONAP”, dijo Xavier Susterac, Vicepresidente Sénior de BASF Personal Care Europa.
BASF, es uno de los principales procesadores globales de productos oleoquímicos: una de sus materias primas clave es el aceite de palmiste y sus derivados principales. Ambos se utilizan principalmente para la producción de ingredientes para las industrias de cosméticos, detergentes y productos de limpieza, así como en la nutrición humana.
FONAP
Al revisar su carta de membresía, la Asamblea General de FONAP se ha abierto ahora a la parte ascendente de la cadena de valor de la palma, los productores de oleoderivados como “Promotor” de la asociación, lo que hace posible la entrada de BASF.
“Le damos la bienvenida a BASF como miembro oficial Promotor de FONAP. Nos complace fortalecer nuestra red y multiplicar nuestros esfuerzos conjuntos”, dijo Daniel May, Secretario General de FONAP.
El FONAP se estableció en 2013 y se registró oficialmente en 2015 como una alianza de empresas, organizaciones no gubernamentales, asociaciones y el Ministerio Federal de Alimentación y Agricultura de Alemania (BMEL). La asociación tiene actualmente 44 miembros, incluidas pequeñas, medianas y multinacionales compañías de diversos sectores de procesamiento de aceite de palma.
El objetivo del Foro para el Aceite de Palma Sustentable (FONAP) es aumentar significativamente la proporción de aceite de palma certificado, aceite de palmiste y sus derivados y fracciones en los mercados alemán, austriaco y suizo. Juntas, las empresas miembros están trabajando para lograr que todo el aceite de palma y aceite de palmiste disponible en estos mercados se certifiquen lo antes posible. Los miembros regulares se comprometen a usar sólo aceite de palma 100% certificado y a mejorar los sistemas de certificación.
Por qué la certificación
En más de una década, la creciente demanda de productos basados en palma y la expansión de las plantaciones de palma, especialmente en Indonesia y Malasia, han destruido bosques de gran valor, turberas y biodiversidad. Al mismo tiempo, el aceite de palmiste en particular es irremplazable para el negocio de derivados oleosos debido a sus características específicas. Este dilema significa una gran responsabilidad para la industria.
El principal organismo de certificación global para la industria de la palma es la Mesa Redonda sobre Aceite de Palma Sustentable (RSPO). El aceite de palma sustentable ha sido certificado por la RSPO de acuerdo con criterios específicos para ayudar a reducir los impactos negativos del cultivo de aceite de palma en el medio ambiente y las comunidades.
BASF fue uno de los primeros miembros de la RSPO y se convirtió en miembro del enfoque de reserva de Alto Contenido de Carbono en 2016 para aprovechar las actividades de la industria y detener la deforestación. Desde entonces, BASF integró los criterios del Enfoque de HCS, como la conservación del bosque y la turba, así como los derechos sociales y laborales, en su Política de Aprovisionamiento de Palma.
“Nos comprometemos intensamente con nuestros grupos de interés en todos los niveles de la cadena de suministro para comprender sus necesidades y ayudarlos a alcanzar sus objetivos. Nuestros clientes confían en nuestra experiencia para atender los requisitos adicionales necesarios para cumplir sus compromisos”, dijo Susterac. “Más allá de esto, apoyamos a los pequeños productores como un eslabón importante dentro de la cadena de valor.”
En 2016, BASF expandió sus volúmenes de compras en aproximadamente 32.000 toneladas métricas a 158.000 toneladas métricas, y casi duplicó las ventas de productos certificados basados en aceite de palmiste. BASF tuvo una exposición global al aceite de palma de 508.000 toneladas métricas en 2016.
