Lejos de las cámaras, Violeta Lo Re, la ex de Ricardo Fort, empezó una nueva vida dedicada de lleno a la actividad avícola. Es que desde el año pasado se puso al frente de La Huevada, un emprendimiento familiar, a través del cual comercializa huevos de gallinas ponedoras.
Todo comenzó cuando su marido se asoció a una granja automatizada en Baradero, donde tienen 80 mil gallinas. Al principio, tuvieron que reacondicionar el establecimiento, luego lo pusieron en marcha y salieron los primeros huevos, de un tamaño pequeño, de acuerdo a la edad de los animales. Una vez que tomaron un tamaño más comercial, salieron a vender. Ahora, también lograron producir huevos de doble yema.
Primero, vendían maples, docenas y media docenas por casas de la zona norte del gran Buenos Aires, y hoy se agrandaron y distribuyen con una logística más consolidada, de la que se encarga Lo Re, además de lo vinculado con packaging y publicidad.
¿Cómo es el sistema de producción? Lo Re contó en declaraciones al sitio Teleshow que en su granja las gallinas duermen ocho horas en oscuridad y ponen a razón de un huevo por día. No crían pollos, solamente hacen huevos.
En las redes sociales, se pueden ver las fotos que muestran cómo es el predio donde trabajan, con jaulas en desnivel, que permiten que el huevo caiga y se deposite en una manga que lo transporta a su almacenamiento.
La ex mediática, además de coordinar pedidos, comparte recetas en sus redes sociales junto a sus hijos. Y se animó a opinar de la polémica por las “gallinas violadas” que destaparon veganos españoles. “Hay que estar más informadas: la gallina pone huevos de por sí, no necesita de un gallo. Si ella lo pone y le da calor, va a salir un pollo, nadie fuerza nada”, dijo.
En esa línea, consideró que la crisis y la declaración de la Emergencia Alimentaria son signos de que “no es momento para pensar en si la gallina está triste o contenta”. “Es muy costoso todo, apenas se logra que una pyme sobreviva como para estar pensando en una inversión mayúscula y una modificación porque la gallina está triste, como se hizo en España”, concluyó.