El municipio de Junín informó que el terraplén que construye para proteger a los vecinos del posible desborde del río Salado estará terminado en tres días, dado que de los diez kilómetros planificados ya hay cinco finalizados.
La obra está hecha sobre la base de silobolsas, plástico y tierra, debido a que a la vera del río hay cinco barrios suburbanos con más de trescientas casas en situación de vulnerabilidad por la cantidad de agua que cayó en los últimos meses. Sin ir más lejos, en abril se registraron 365 milímetros por lluvias en todo el partido, en tanto que creció el caudal de la laguna Mar Chiquita por agua proveniente de La Salada desde General Pinto, que recibe a su vez agua de La Picasa.
“El panorama es crítico, de emergencia, pero aún el agua no ingresó al casco urbano, aunque se perdieron 90 mil hectáreas productivas que están bajo el agua”, expresó el intendente de Junín, Iván Petrecca,
En ese sentido, el dirigente dijo a la agencia Télam que “el terraplén está por la mitad. En tres días más estará terminado y eso nos va a permitir en caso de que haya más crecidas de aguas arriba -lluvias locales y las lluvias de Santa Fe y General Arenales- prevenir un desborde”.
“La laguna Gómez está colapsada y ya pasó la muralla de contención. Ese agua va por el canal que atraviesa la ciudad”, describió Petrecca, al tiempo que indicó que “está al límite, pero ello no significa que mañana desborde. Hay tiempo para ir evacuando; pero si las lluvias son normales, el terraplén soportaría el agua”.
