Ya alejado de las canchas, el ex jugador de fútbol de River Plate, Leonardo Ponzio, continúa apostando por el agro argentino.
En su rol de productor, en esta oportunidad mostró “en vivo” el proceso de cosecha de maíz en el campo familiar en el que trabaja en Las Rosas (Santa Fe), donde “goleó” en los rindes: superaron los 12.000 kilogramos por hectárea.
Por medio de una cosechadora New Holland CR 7.90 IntelliSense, recolectó lotes sembrados en el establecimiento “Los Abuelos” con los híbridos de maíz NK 835 Viptera3, con destacado potencial de rendimiento en ciclo corto, y NK 855 Viptera3, con versatilidad para todos los ambientes, agronomía y sanidad, de NK Semillas.

EL “TRABAJO EN EQUIPO” DE LEO PONZIO
Cuando se refiere a su etapa como productor, Ponzio hace referencia a que para ganar el partido en la campaña también es clave lo que se requiere para ganar un partido de fútbol: trabajo en equipo.
“Armé un buen cuerpo técnico relacionado al campo. Con mi viejo nos reunimos para ver qué vamos a sembrar; mi cuñado es mi mano derecha y el que más está en el día a día; y el ingeniero agrónomo, quien decide al momento de sembrar”, destacó Ponzio.
Asimismo, dijo que la tecnología es de los aspectos más importantes que encuentra el futbolista a la hora de trabajar, lo que se relaciona con la importancia de elegir una máquina en el campo.
“Buscamos incorporar más innovación para lograr mayor precisión y productividad en el campo”, indicó.
José Queiroz, Director Comercial de New Holland, estuvo presente durante la cosecha y destacó el diferencial de la marca: “Reforzamos nuestro compromiso en la búsqueda de mayor eficiencia y productividad en el agro argentino. Por eso, en nuestra fábrica de Córdoba pensamos y diseñamos productos innovadores y conectados que están a la altura de las necesidades de nuestros clientes. Es un orgullo acompañar a un gran exponente como Leo Ponzio y también a cada productor y contratista que nos elige año tras año”.
LA EXPERIENCIA, AL BORDO DE LA COSECHADORA
En este contexto, el encargado de conducir la CR 7.90 fue Leonardo Ávila, responsable de los servicios de cosecha de la empresa Glimax y experimentado operario de la máquina, ya que es la tercera que maneja y la segunda con la tecnología IntelliSense.
Glimax tiene una larga historia con New Holland a través de sus dueños, Julián Muguerza y Lara Giuliani, clientes de la marca desde 2003 y quienes adquirieron el primer pulverizador Defensor SP 3500 y la primera cosechadora CR 7.90 IntelliSense que se comercializaron en Argentina.

Ávila cuenta con más de 12 años de experiencia como operario y más de 3.000 hectáreas cosechadas con la tecnología IntelliSense.
“Esta máquina ayuda mucho al operador. Antes regulábamos cuatro veces por día, y ahora trabajamos mejor y más relajados, sumado a que las regulaciones automáticas que va haciendo la cosechadora ayudan a obtener la mejor calidad de grano”, destacó.
Además de toda la tecnología integrada en la CR 7.90 IntelliSense, New Holland le permite al productor seguir en tiempo real y de manera remota las tareas en el campo.

Como ejemplo, durante la cosecha en Los Abuelos, Muguerza siguió en vivo los movimientos a través de la aplicación FieldOps, y pudo chequear que todo funcionara correctamente.
También, el concesionario y la fábrica de Córdoba siguieron las tareas de la cosechadora en tiempo real y de manera remota mediante la Central de Inteligencia.
HÍBRIDOS CON ALTO RENDIMIENTO
En cuanto a los excelentes rendimientos alcanzados, Ponzio valoró: “Desde que aceptamos el desafío de NK, tuvimos la posibilidad de acceder al conocimiento técnico que nos brinda la marca probando dos híbridos diferentes y ambientados en el mismo lote en Las Rosas. Desde aquella visita a la planta de Venado Tuerto y al Centro de Investigación, conocimos bien el semillero desde adentro, hubo compromiso de ambas partes y el equipo de NK terminó siendo una familia trabajando siempre a la par”.
“Hicimos siembra variable, pusimos la maquinaria, tuvimos la mejor prescripción usando herramientas digitales y llegamos a la cosecha de maíz con resultados más que satisfactorios”, elogió.
Desde el lado de la empresa, el gerente de Marketing de NK, Francisco Pérez Brea, subrayó: “El profesionalismo que tiene Leo Ponzio en la cancha lo tiene hoy como productor agropecuario. La recomendación de producto fue similar a la que recibe un cliente NK para su lote cuando compra nuestros híbridos. Nuestros distribuidores a lo largo del país se encuentran formados para dar recomendaciones de producto, prescripciones y asesoramiento técnico”.
Para el ejecutivo, la gran ventaja es que “las herramientas digitales permiten escalar la recomendación de manejo del cultivo a todos los clientes, eligiendo el producto correcto y el manejo adecuado. En este caso se usó Sistema NK para la selección del hibrido y Cropwise para el armado de las ambientaciones y prescripciones que dieron por resultado una cosecha exitosa”.
Como se mencionó, tanto Sistema NK como la plataforma Cropwise tuvieron un rol clave para aprovechar la buena productividad del lote familiar de Leo Ponzio.

La estrategia fue elegir dos híbridos diferentes para diversificar el riesgo en los períodos críticos como floración y llenado de grano.
“Elegimos el NK 835 VIPTERA3 (MR121) y el NK 855 VIPTERA3 (MR 124), dos materiales con alto potencial de rinde y buena estabilidad. Planificamos el cultivo para un año climático Niña y designamos la densidad de los ambientes. Por suerte, el clima en la zona acompañó siendo Neutro favoreciendo al rendimiento final del maíz en este lote”, explicó Andrés Caggiano, gerente de Desarrollo de Producto en NK.
“Usamos Cropwise Planting para crear prescripciones y la función Imagery para revisar la sanidad del lote de maíz NK. El resultado de las ambientaciones fue positivo porque los ajustes que hicimos tanto en la densidad como en el manejo permitieron pasar el estrés térmico, terminar la campaña de manera satisfactoria y sumar una capa más de información para la siguiente campaña”, agregó.
Por su parte, Matías Capponi, asesor agropecuario del establecimiento “Los Abuelos”, hizo referencia al trabajo conjunto que desarrollaron junto a la semillera y que derivó en estos muy buenos resultados.
“Este proceso de sembrar maíz NK arrancó en agosto cuando nos juntamos con Andrés Caggiano y Santiago Bera del equipo técnico de la marca para armar prescripciones. Hicimos análisis de suelo y mapeos y, en este lote que no tiene mucha variabilidad, determinamos 2 ambientes y dos híbridos diferentes: en el ambiente más alto pusimos 82 mil semillas para tratar de lograr 80 mil plantas a cosecha y, en el otro ambiente, unas 76 mil semillas para lograr 74 mil pl/ha. Luego decidimos fertilizar con 300 kg de urea en el ambiente alto y con 250 kg de urea para el ambiente más bajo”, detalló.

También puntualizó que todo esto se hizo tras una rotación de trigo y soja. “Hicimos el análisis de suelo, en agua útil, arrancamos arriba de los 250 mm y hubo lluvias para sembrar. En septiembre tuvimos más de un mes sin lluvias, pero luego, hasta diciembre, hubo precipitaciones para lograr el potencial de rendimiento de ambos híbridos sembrados. En enero, tuvimos entre 10 a 15 mm, hubo temperaturas muy altas a largo plazo en la zona, pero nada afectó al rendimiento final”, completó
Así fue que tanto el NK 835 VIPTERA3 como el NK 855 VIPTERA3 fueron cosechados el 26 y 27 de marzo y se logró un rendimiento más que satisfactorio, superando los 12.000 kg/ha (14,5% H) dentro de las 82 HA en Las Rosas, Santa Fe.

“El rendimiento fue mejor de lo esperado ya que el objetivo final era superar los 110 quintales y estamos por encima de esa cifra de rinde estimado. Durante todo el período del cultivo vimos que ambos maíces tuvieron buen perfil sanitario, y al momento de la cosecha, no hubo plantas quebradas ni volcadas. Estamos muy contentos con el resultado de esta experiencia a campo junto a NK y la idea es seguir usando otros híbridos de la marca como girasol y soja durante la próxima campaña”, repasó.
Bajo todos estos datos, Leo Ponzio definió: “En el fútbol se necesita planificar cómo salir de un daño, pensar en las lesiones de un jugador. En el campo, está el factor clima, y poder volcar toda esa información a las máquinas con empresas que tienen cosechadoras con la última tecnología. Ver cómo funcionan y que las pérdidas son cada vez menos, todo eso te da la posibilidad de arriesgar”.