Las autoridades de Santa Lucía dan los toques finales a los preparativos para la próxima visita de dos expertos argentinos en el marco de API Caribe, un proyecto regional del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) junto al gobierno de Argentina para impulsar la industria apícola de las naciones caribeñas.
Gustavo Martínez Pandiani, Embajador de la República Argentina en Barbados, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía y la Organización de los Estados del Caribe Oriental (OECS), visitó esta semana Santa Lucía para reunirse con representantes del Ministerio de Agricultura, organizaciones de apicultores, el IICA y otras partes interesadas para ultimar detalles de la visita de los especialistas.
Los expertos argentinos Elian Tourin y Liliana Gálvez llegarán a la ciudad de Castries a inicios de diciembre para comenzar la capacitación de los apicultores locales y recorrer los apiarios de Santa Lucía.
“Identificamos la apicultura como una de las prioridades en la región. El objetivo del programa es aportar, además de eficiencia técnica para la producción de miel, mejores estrategias para su comercialización y marketing”, dijo el embajador Pandiani.
“Vemos que, muchas veces, el principal desafío es cómo vender la miel y cómo prepararse para exportarla. Dado el costo de importación de productos alimenticios en Santa Lucía, al igual que en otras partes del Caribe, este proyecto significa una gran iniciativa para que la isla comience a exportar miel en lugar de importarla”, agregó.
API Caribe comenzó en julio de 2019 y se desarrolla mediante la cooperación entre el gobierno de Argentina, el IICA y los Ministerios de Agricultura de cuatro países caribeños: Barbados, Dominica, Santa Lucía y San Cristóbal y Nieves. Especialistas argentinos facilitarán la instalación de colmenas tipo Perone, cuyo rendimiento es mayor que las colmenas Langstroth, utilizadas tradicionalmente en esos países.
“API Caribe es un ejemplo exitoso de cooperación triangular entre Argentina, IICA y CARICOM”, aseguró Pandiani.
El proyecto busca la transferencia de conocimientos y el desarrollo de capacidades productivas en las naciones caribeñas.
El alto índice de vulnerabilidad de los países caribeños frente a los eventos climáticos extremos y el gran potencial de la apicultura para generar beneficios socioeconómicos en las comunidades rurales del Caribe convierten a API Caribe en una oportunidad atractiva para encaminar las economías de estas naciones hacia la sostenibilidad.