Con un mercado externo cada vez más voraz y una ingesta per cápita de los argentinos recompuesta a la par de los bolsillos, no es novedad que la carne se asemeja cada vez más a la leyenda del rey Salomón. Pero, obviamente, nadie debe querer partir al medio al vástago y matar el negocio, sino incrementar la productividad por novillo.
En este contexto, la Secretaría de Agricultura nacional tomó la iniciativa de abrir el debate con la cadena cárnica para “repasar la prohibición de los anabólicos. Queremos conocer la opinión del sector y, si adhieren a la idea, buscar la manera de llevarlo a cabo”, anticipó a Infocampo el asesor de la cartera, Miguel Tezanos Pinto.
El funcionario aclaró que los promotores de crecimiento “se podrían volcar a los animales destinados al mercado interno”. El objetivo es obvio y las estimaciones oficiales hablan que, de acuerdo con la categoría, “se puede llegar al 15% de ganancia en productividad por animal”, dependiendo de cuánto se generalice el uso del producto.
En abril de 2004, el Senasa -a pedido de las autoridades sanitarias de la Unión Europea- emitió la Resolución 447/04, por medio de la cual se prohibió el uso de productos veterinarios anabolizantes.
En realidad, “la prohibición tuvo un fuerte sesgo continental y del Mercosur y pensando mucho en la UE, pero desde lo técnico tenemos claro que si a los animales se les aporta anabólicos es una mejora tecnológica indudable”, enfatizó Tezanos Pinto, para recalcar que “al hacer la prohibición, Campos bajó el conflicto (con el Viejo Continente) a nivel cero”.
De prosperar este debate, la Argentina pasaría a tener un sistema dual, con determinadas exigencias para la UE y otras para el mercado interno y aquellos destinos que no objetan el uso de estos productos veterinarios, como EE.UU. o Japón.
Sin embargo, para el asesor de la SAGPyA, “en este momento ya hay un sistema dual, los animales que van a la UE tienen una identificación. En la práctica hay un doble estándar”, reconoció.
En este contexto, fuentes de la cartera agrícola aseguraron a Infocampo que “es inminente la puesta en marcha de la trazabilidad para todo el rodeo nacional, pero con fechas de implementación prudenciales”.
Por el momento, nadie habla de quién se hará cargo de los costos de este control exhaustivo (reclamado por la UE y por los propios integrantes de la cadena), lo que sí se sabe es que el titular del Senasa, Jorge Amaya, “en la última reunión, aseguró que en 3 meses saldrá una licitación para la informatización de todo el organismo”, recordó Miguel de Achával, presidente de la Cámara Argentina de Engordadores de Hacienda Vacuna.
El comité veterinario del mercosur había recomendado su utilización
La potencial modificación de la reglamentación argentina tendrá un impacto sobre las prácticas de todo el Mercosur.
Desde la SAGPyA explicaron que de prosperar el debate, “nos remitiríamos a la comisión técnica del Mercosur, que en realidad recomendó en su momento la utilización de los anabólicos. Ellos adhirieron al uso desde el punto de vista técnico, pero el Mercosur tomó la decisión de prohibirlos desde lo político”.
Pero, aquí hay dos cuestiones interesantes: la primera es que Brasil “usa una hormona, la BST, para incrementar su producción de leche”, recordó De Achával. La hormona está prohibida en varios países de Europa y América. El segundo “detalle” quedó en boca de Tezanos Pinto, al aseverar “que la UE no mande mensajes, porque son los reyes de las medidas pararancelarias y como nosotros lo sabemos, sería bueno anticiparnos a esto”. Las cartas comienzan a aflorar sobre la mesa y la decisión salomónica dejará bien en claro cuál es la madre… patria.
Marianela Garbini mgarbini@infocampo.com.ar
