En la actualidad, el sector de la agricultura familiar realiza un aporte fundamental al desarrollo de nuestro país que genera ocupación y fortalece las economías regionales; además, participa activamente en la cadena agroalimentaria, abasteciendo, con su producción de alimentos, a un mercado interno creciente.
Para participar de dicho proceso, desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) destacan la importancia de tramitar la obtención del Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (Renspa). Dicho trámite es obligatorio y gratuito, y se realiza en la oficina del Senasa más próxima a su unidad productiva, como así también por autogestión o por preinscripción vía página web.
El Renspa vincula, mediante un registro de georeferenciación, al productor con su campo y su producción, de esta manera, hace posible la rastreabilidad de la mercadería que llega a la mesa de todos los argentinos; es decir, este registro posibilita observar el origen o la procedencia del producto que se adquiere.
En la misma línea, desde la entidad afirman que “aquellos productores que se encuentren inscriptos en el Registro Nacional de Agricultores Familiares (Renaf) podrán acceder a importantes beneficios como la eximición de ciertos aranceles en trámites del Senasa (a partir del cruzamiento de datos, se eximen aproximadamente 80 aranceles relacionados a inocuidad, sanidad tanto animal como vegetal, y de solicitud de análisis en laboratorio oficial para quienes participen de un proyecto con acompañamiento técnico)”.
Para obtener más información los productores familiares, cooperativas y Pymes pueden comunicarse con Agricultura Familiar del Senasa, escribiendo a senaf@senasa.gob.ar.