Esta mañana arrancó el taller regional que la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) lleva a cabo en Buenos Aires hasta el 24 de agosto bajo el título de “Normas de la OIE: Facilitar un comercio internacional seguro”.
Del encuentro participan jefes de los Servicios Veterinarios y encargados de los temas sanitarios vinculados al comercio de animales y sus productos provenientes de los 30 Países Miembros de la OIE en el continente americano.
En el marco de la presentación en el Hotel NH City, Infocampo conversó con Luis Barcos, representante de OIE para las Américas, y con Gastón Funes, vicepresidente de la Comisión del Código Terrestre, quienes resaltaron que el objetivo del taller es que los participantes “comprendan el proceso de desarrollo de las normas y la aplicación de las mismas para garantizar un comercio internacional seguro de animales y sus productos derivados”.
En ese sentido, Barcos resaltó que la idea es “discutir con los encargados de las negociaciones internacionales tanto de importación como de exportación de productos de origen animal las normas internacionales que rigen el comercio mundial, cómo se usan, qué pasa cuando hay disputa de comercio por diferencias entre los países”.
“El objetivo es que aprendan a utilizar las normas adecuadamente para facilitar el comercio. El taller seguirá el año próximo, donde incorporaremos todas las aduanas de las Américas, siempre con el objetivo de facilitar el comercio”, remarcó Barcos.
En ese sentido, aseguró que “muchas veces la problemática es acceder a un mercado con carne cuando un país podría acceder sin inconvenientes, y por el estatus sanitario el país importador dice que no, pero de acuerdo a las normas de la OIE debería aceptarlo. A veces son restricciones injustificadas, por decisiones políticas de los países, y a veces es por falta de entendimiento entre las partes”.
“Las normas de la OIE dicen que se puede comerciar sin riesgo, pero los países pueden poner objeciones, y tienen que demostrar por qué. Hay dos niveles: uno tiene que ver con las normas, y otro cuando se quiere aplicar una medida más restrictiva que la norma, para lo que hay que elaborar un análisis de riesgo”, sostuvo el directivo.
Por su parte, Funes señaló que “es importante explicar el acuerdo de medidas sanitarias y fitosanitarias de la Organización Mundial de Comercio (OMC), que ha reconocido a la OIE como referente internacional para las normas que tengan que ver con sanidad animal y zoonosis. Legalmente, los países deben seguir las normas de la OIE y los mecanismos de análisis de riesgo cuando imponen medidas sanitarias para importación y comercio de productos”.
“Buscamos alentar a los países miembros a que participen y aprovechen las normas, y evitar que se apliquen medidas sin justificación técnica que actúen como barreras al comercio. Al principio la OIE tenía un enfoque más rígido, pero con la nueva información científica y la experiencia de países miembros, las normas se han ido modificando, y se tienen en cuenta las situaciones de los distintos países”, detalló.
Consultado acerca de la situación de la Argentina en relación con la apertura del mercado estadounidense de carnes, Funes aseguró que “el panel emitió su dictamen final, con intervención de la OIE. Estados Unidos cambió su normativa desde el punto de vista de sanidad animal, la cual permite a la Argentina exportar carne a su país. Lo que falta ahora es convalidar la equivalencia a nivel de temas de salud pública en los frigoríficos que van a exportar la carne a los Estados Unidos. Hubo una misión a fines del año pasado, y en estos momentos se está terminando el informe final sobre el cual el SENASA envió las respuestas a los pocos aspectos observados por la mision de EEUU, por lo que se espera que muy pronto el mercado estará operativamente abierto”.
Por otro lado, se refirió al caso de la carne adulterada en Brasil y afirmó que se trata de un país “muy activo en la OIE. El escándalo fue manejado por el gobierno de Brasil, por lo que la OIE no tuvo un rol directo. Brasil manejó bien este problema y llegó a acuerdos con sus socios comerciales para poder seguir exportando sus carnes”.
Por último, el experto contó que durante el taller se abordarán también “los diferentes mecanismos que la OIE propone para evitar llegar a disputas comerciales legales a nivel de la OMC por temas sanitarios”.
“La OIE tiene un proceso voluntario de mediación con una base científica, no legal. Expertos analizan en forma amigable para llegar a un consenso. Cuando se establece un panel legal a nivel de la OMC, ésta entidad pide muchas veces el asesoramiento de expertos de la OIE”, cerró.