-En el marco de los reclamos y desacuerdos entre industriales y productores ¿Cuál es el panorama que enfrenta la lechería argentina en el corto plazo?
-Estamos pasando por una situación sumamente difícil, sumamente en el límite, fundamentalmente en el tema precios. En Santa Fe y Córdoba se está pagando por litro un valor inferior al del costo de producción, lo cual lleva a una situación insostenible de la producción.
-¿De qué manera se llegó a esto? ¿Es la falta de políticas de apoyo a la producción o una especie de acuerdo industrial para pagar menos?
-Realmente creo que esto es producto de la cartelización de la industria inducida por el mismo gobierno, del mismo modo que está pasando con los precios frutihortícolas, la carne y los granos, donde el ejecutivo pide que no se pague más de los valores estipulados y viendo que la producción no cae siguen adelante. Estamos jugando con fuego. La producción tarda en reaccionar ante la baja de precios, porque trata de subir la facturación con más productos, pero va a llegar el momento en que esto se va a agotar.
-De todos modos, siempre se habló del gran potencial de crecimiento que tiene la actividad en el país, ¿esto sigue siendo así?
Si es cierto, con una política razonable la Argentina está destinada a crecer enormemente en lecheria. Tené en cuenta que es la única actividad que bien llevada, puede competir con la agricultura en las zonas más fértiles del país. No así la ganadería que esta siendo relegada a zonas más marginales. Siempre estamos hablando que tienen que existir políticas que permitan prever, invertir, usar sistemas eficientes y con un horizonte de cierta rentabilidad y como estamos es imposible que esto pueda darse.
-¿Cuál pensás que puede ser la salida a esta situación?
-Lamentablemente a esto lo veo muy parecido a otras situaciones que se dieron en algún momento de la historia. Lo único que soluciona este tipo de situaciones estáticas, a no ser que se invente algo novedoso que no lo veo, es la escasez. Cuando comience a faltar la leche esto se va a dar vuelta y va a suceder así por largos años. Parecería que la industria y el gobierno no aprendieran de los viejos errores. Cuando se rompa la cartelización por necesidad de mercadería obviamente, no va a quedar otra que subir los precios.
-¿Cómo se llega entonces a un balance entre el control de los precios internos que persigue el gobierno y la suba de precios que los productores reclaman? ¿Qué pasó con las retenciones?
-Las retenciones deberían eliminarse o bajarse a la situación original de julio de 2005. En su momento sirvieron porque atenuaron una baja que se insinuaba a principios de la primavera y funcionaron como colchón. Podría decirse que no se dio en el precio que esperaba el consumidor o el gobierno, pero la caída hubiera sido más brusca si se hubieran bajado a tiempo y poder así exportar el excedente y abastecer el mercado local sin ninguna dificultad.
-De no tener la actual coyuntura política y de precios ¿hasta donde puede crecer la actividad en el país?
-Para mi no tiene límites. Puede competir con la sojización y crecer a la par de los mercados. Si los mercados aparentemente tienen una demanda sostenida, creciente y sustentable. Había proyecciones que indicaban un crecimiento de hasta 15.000 millones de litros en cinco años. Toda la Pampa Húmeda es apta para producir leche en condiciones muy eficientes, además nuestro país produce maíz con altos rindes y la mejor genética bovina. Solo faltan señales.
SANCOR: No importa quien haga la inversión
En cuanto a la polémica por la Asociación del Grupo Soros a la cooperativa Sancor, Biolcati fue muy claro:
âEl capital cuando se dedica a invertir , es bueno sea nacional o extranjero. Lo que a mi me interesa es la inyección de capital genuino que esté para quedarse y para trabajar en el sector. Creo que es un buen aporte, que lo haga Soros u otro.
âMi impresión es que esta empresa que esta asociándose a Sancor, por el conocimiento que tengo de otras inversiones en la zona de Venado Tuerto en la provincia de Córdoba, lo han tomado muy en serio. Evidentemente saben lo que están haciendo y bienvenido sea porque la situación de la cooperativa era insostenible. Sino, habría que haberle tirado un pie desde el gobierno para salvarlo, aún a cuestas de no lograr la eficienciaâ.
Gustavo Malem
gmalem@infocampo.com.ar
