Este miércoles, el río Paraguay amaneció con una altura de 1,36 metros en bajante a la altura de Formosa, una situación a la que los expertos califican de “extraordinaria”.
La situación se repite en Paraguay, donde la preocupación de las autoridades aumenta. Es que en Asunción el caudal llegó a menos de un metro en las últimas horas, luego de que el martes 29 se produjera un abrupto descenso de 33 centímetros.
En ese sentido, la bajante está directamente vinculada con lo que sucede en el río Paraná, dado que el Paraguay es su principal afluente.
“En Formosa, el río está bajando entre 3 y 5 centímetros diarios. Según el INA (Instituto Nacional del Agua), esta tendencia va a continuar y todavía vamos a tener una pequeña bajante más”, explicó Juan Carlos Roleri, jefe de Prefectura en la provincia.
Esto afecta directamente a la navegación, por lo que Roleri recomendó no salir de noche por la presencia de bancos de arena, piedras y objetos que antes no se veían.
“La gente del lugar está sorprendida. Hace mucho tiempo que no ve esta bajante, es extraordinaria. Contrariamente, meses atrás teníamos una crecida también extraordinaria, cuando se llegó a un pico de 9, 62 metros”, recordó el experto.