A mediados de mes de julio de 2021, la Cámara de Senadores aprobaba el nuevo régimen de promoción para la industria de los biocombustibles, con 43 votos a favor y 19 votos en contra.
Entonces, la norma apuntaba “a brindar certidumbre y condiciones que permitan el desarrollo de una actividad diversificada y eviten la concentración en el sector”.
Sin embargo, sigue imperando la incentidumbre a casi siete meses de la sanción de la nueva normativa.
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Más allá de los acuerdos de precios puntuales, establecidos para los biocombustibles (puntualmente para el biodiésel hasta marzo de esta año), la nueva ley aun sigue sin un marco regulatorio establecido.
“No hay grandes novedades sobre la reglamentación de la ley, más allá del sendero de precios acordado para enero, febrero y marzo, inclusive, con la secretaría de Energía”, expresó Juan Facciano, presidente de la Cámara de Energías Renovables de Santa Fé, a Radio Genésis.
Respecto a la definición de un marco regulatorio, Facciano comentó que, entre diciembre y enero, se estuvo trabajando en algunas alternativas e intercambios en reuniones con la secretaría y lo que se está aguardando, ahora, es la convocatoria para avanzar en este tema.
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Según lo explicado por el directivo, sobre el biodiésel, esta reglamentación se dividirá en dos etapas: la primera asociada a registros y calidad y, en una etapa siguiente, la determinación de una fórmula para definir los precios.
“Entiendo que hacia finales de este mes se restablecerá los contactos para terminar de definir el marco de funcionamiento de la nueva ley”, auguró Facciano.
