Luego del aumento del biodiésel establecido la semana pasada, la Secretaría de Energía de la Nación arrancó esta semana con un incremento del bioetanol, respondiendo a la demanda de las empresas elaboradoras de este biocombustible que se vieron afectadas por el aumento de costos provocado por la devaluación del tipo de cambio oficial.
Según la resolución publicada este lunes en el Boletín Oficial, los nuevos precios por litro para el bioetanol que deben comprar las petroleras para “cortar” las naftas son:
- $ 237,672 para el combustible obtenido de la caña de azúcar
- $ 224,309 para el extraído del maíz
En ambos casos, el precio vigente desde el 2 de agosto era de $ 199,059, por lo que esta actualización configura un alza del 19% en el caso de la caña de azúcar y del 13% en el maíz.
LOS PRECIOS DEL BIOETANOL
De esta manera, si se tiene en cuenta que los valores ya habían subido 15% en el inicio de agosto con respecto a julio, como consecuencia del dólar maíz, el alza completa de agosto alcanza al 37% (caña de azúcar) y 30% (maíz).
Además, una novedad es que, después de casi un año -la última vez había sido noviembre de 2022-, los valores determinados por Energía son diferentes, en función de si el bioetanol proviene de una fuente u otra.
Al respecto, la principal novedad es que, a raíz de la situación macroeconómica y los reclamos de las empresas, el Gobierno se vio obligado a adelantar el plazo por el cual iba a empezar a aplicar otra vez fórmulas para la determinación de precios del bioetanol.
El bioetanol vuelve a regular su precio en base a una fórmula: cuándo y cómo comenzará a regir
Eso estaba previsto recién para noviembre, y por ahora seguía manteniéndose el criterio de actualizar los valores en función de los aumentos de las naftas en los surtidores de YPF.
Pero “en el actual contexto macroeconómico, y de acuerdo con las presentaciones efectuadas por los representantes de la mayoría de las empresas elaboradoras de bioetanol a base de caña de azúcar y de maíz del sector, resulta necesario atender la incidencia que posee la reciente modificación de los precios relativos y aplicar los procedimientos de cálculo de precios del bioetanol“, indicó Energía.
Y luego agregó la necesidad de actualizar los parámetros que se incluyeron en las fórmulas de determinación de precios, “incorporando alternativas que permitan contemplar los potenciales impactos que pudieran generar, en el escenario macroeconómico actual, la variación significativa en los precios relativos de algunos insumos que componen la estructura de costos de elaboración del bioetanol a base de caña de azúcar y maíz, a fin de que el precio de adquisición del citado biocombustible refleje los costos actuales de producción de las empresas elaboradoras del sector”.