El reconocido consultor ganadero, Fernando Canosa, ex integrante de la Mesa de Ganados y Carnes, también quien fuera coordinador de ganadería del Movimiento CREA, compartió un breve análisis sobre un “momento inédito” para la ganadería argentina.
Justamente, lo hace en una semana muy especial para el sector, en la cual el Ministerio de Agricultura dará a conocer su política ganadera para el año que viene, la cual será presentada a los representantes de la Mesa de Enlance este jueves. Este martes, por su parte, equipos ténicos de la carte y las entidades se reunirán.
“En el ultimo año se produjo una particularidad inédita que nos esta llevando a un cambio en los sistemas de producción: el alto valor del ternero y del maíz conlleva a un incremento de las recria pastoril; a una invernada mas larga, con un mayor peso de terminación”, dice Canosa.
Esta situación coyuntural, agrega, provocó una menor oferta en el 2021 registrándose una merma de enero a octubre de 865.000 cabezas vendidas, pero a la larga a una mayor producción. “Las cabezas están pero salen mas tarde y mas pesadas”, advierte.
Además, explica que el buen valor de la vaca de descarte incita al rechazo de la vaca no productiva e indirectamente un aumento de los índices reproductivos en el campo.
“Esta combinación de sucesos llevó a una menor oferta de hacienda para faena de consumo y una mayor oferta de vaca para exportar”, sostiene.
De esta forma, el rodeo está intacto. Así, destaca Canosa, sin haberse producido mermas productivas ni considerables del stock, marchamos hacia una mayor producción en el 2022.
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“Si dejemos que fluyan las decisiones positivas de los ganaderos, del mercado, nos encontraremos en círculo virtuoso, de mayor producción, mayor oferta y exportación que trae aparejado una mayor oferta de los cortes de mayor consumo, los parrilleros que no se exportan”, afirma.
El consultor analiza que los problema de oferta circunstancial, desde el punto de vista del consum, podrá ser subsanado por las otras carnes (Argentina es el segundo consumidor mundial de proteína animal), pero estamos ante una gran oportunidad.
“Si generamos nuevas intervenciones, cierre de exportaciones y cupos volveremos a generar incertidumbre y el consecuente descredito cayendo en un círculo de liquidación como años atrás”.
En conclusión, señala, si se profundiza el aumento de la producción en el 2022, habrá mas oferta y el círculo virtuoso nos encontrara en un franco y continuo crecimiento en el 2023 con un mercado interno totalmente abastecido con las parrilleros ofertados sin problemas y exportación creciente generando riqueza y trabajo para todos los argentinos.