El INTA de la localidad de Balcarce creo el primer mapa, a nivel mundial, que permite conocer la probabilidad de ocurrencia de heladas y su nivel de daño sobre el trigo para elegir la fecha de espigazón más adecuada al lugar.
En la Argentina, adelantar la fecha de floración permite que se alcance un mayor rendimiento, pero a la vez aumenta el riesgo de que las heladas dañen a la espiga.
El cultivo de trigo tiene buena adaptación a las bajas temperaturas durante gran parte de su ciclo, aunque hay estados de desarrollo particularmente sensibles, y el daño que se produce por la duración de las heladas.
En este contexto, investigadores coordinados por el instituto desarrollaron dos mapas interactivos que se complementan.
“El primer mapa permite elegir la fecha de espigazón a partir de conocer el nivel de daño y probabilidad de ocurrencia de heladas correspondiente a la fecha habitual de un lote o zona”, explicó Pablo Abbate, investigador de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA Balcarce.
Por otra parte, el segundo mapa presenta la fecha para distintas probabilidades de ocurrencia de la última helada primaveral.
“El daño por heladas es uno de los principales obstáculos a la hora de elegir la fecha apropiada de floración del trigo, por eso es importante contar con una herramienta que indique la probabilidad de daño“, manifiesta el especialista.
Modelo de estimación de daño de heladas
El INTA Balcarce ya había diseñado un modelo matemático que estima el daño por heladas, esa información fue volcada para para crear el mapa.
Esta nueva herramienta diseñada es la más completa, ya que considera el estado de desarrollo de la espiga, las distintas camadas en el cultivo, basándose en la temperatura mínima y la duración de la helada.
El plano contempla 99 estaciones meteorológicas en las que hay información de Paraguay, Uruguay y el sur de Brasil, conseguida a través del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria y la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas.
