Aldo Biondini (Foto) es asesor técnico y manejo campos en Buenos Aires, La Pampa y Córdoba, una zona que conoce muy bien. Su radio de acción es Bellocq, Orense, Copetonas, González Chaves, Necochea, Coronel Dorrego, Indio Rico, Pringles, Coronel Suárez, Cooperativa de Darregueira, Vicuña Mackena, América, Rivera, Huanguelén y General La Madrid.
El técnico hizo dos grandes cambios profesionales en los últimos cuatro años: uno personal y otro agronómico.
En el primer caso, corriendo el año 2017, decidió dejar el semillero para el que trabajaba y lanzarse por cuenta propia. También es asesor en la “Consultora Ganadera”, en Tres Arroyos (Buenos Aires), de Agustín Lizzi.
A posteriori, sobrevino la otra variación. Hace cuatro años, comenzó a hacer algunos ensayos con sorgo y notaba que las plantas “copiaban” el suelo.
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“Observé que en muchos suelos de la zona había grandes falencias en la corrección del pH del suelo y buscando encontré el yeso líquido“, reconoce, además de admitir que siempre estuvo “abierto a investigar y a probar, sin quedarme con lo que ya sabía, sino en ir más allá”.
En ese momento, conoció la nanotecnología en la fertilización y sus beneficios. “No conocía ni la palabra, pero cuando me dijeron que, gracias a esta solución, en dos litros de producto tenía 600 kilos de yeso agrícola -corrector de suelos- me picó el bichito de la intriga”, dice.
Su exploración siguió. Después conoció a Gabriel Lema y Benito González, CEO y gerente técnico de Kioshi Stone, respectivamente.
“La nanotecnología es práctica: te permite trabajar grandes superficies con pequeñas cantidades, aporta nutrientes minerales, una mejora de la calidad del suelo corrigiendo la acidificación y alcalinidad”, explica Biondini.
Beneficios
Respecto a los productos de Kioshi Stone y en lo particular la línea “Mist”, el técnico bonaerense indica: “Lo que hace en el suelo es impresionante y, de hecho, se ven más lombrices luego de un tiempo de trabajo. También con esta tecnología pude recuperar lotes con sal, como en Coronel Dorrego, del productor Junior Arribas, que hoy ya son agrícolas”.
Por otra parte, en los análisis de suelos, luego del cambio en la estrategia de nutrición vegetal, se detecta que se incrementa la materia orgánica. En ese marco, Biondini remarca la importancia de realizar el análisis de suelo.
Entre otros puntos, también subraya la eficiencia y la inteligencia de la nanotecnología.
“Permite aprovechar al máximo los nutrientes al incrementar su biodisponibilidad, lo que contribuye a mantener el equilibrio del suelo. Cuando a la práctica habitual de una fertilización balanceada se le suma nanotecnología, se potencia el rendimiento tanto de las plantas como de los suelos”, describe.
Para cerrar, Biondini reconoce: “Está cambiando la mentalidad. Hay productores que ya le tomaron la mano a esta solución y no lo cambian más”.