Este martes, el Banco Mundial presentó su pronóstico económico para el año 2021 y la reactivación igualitaria entre países parece estar lejos de conseguirse.
Entre los aspectos generales, la entidad destacó que la producción continuará por debajo de los niveles previos a la pandemia de COVID‑19, dado que muchos de los países en desarrollo luchan contra los efectos perdurables de la pandemia.
En datos, se prevé que en 2021 la economía mundial se expanda un 5,6%, en gran medida apalancado por el fuerte repunte de algunas de las principales economías, como la norteamericana y la china. Sin embargo, estará un 2% por debajo de lo previsto en la pre-pandemia.
Bajo este contexto, comenzado el nuevo año, indica el Banco, los mercados emergentes y economías en desarrollo serían lo más padecientes ya que las pérdidas de ingresos per cápita no se habrán revertido.
En lo regional, según las estimaciones, Argentina se perfila como una economía destacada. El crecimiento previsto se proyecta en un 6,4% en 2021, por encima del 5,2% esperado para en América Latina Sur.
Ese 5,2% sujeto, dice el Banco, a un avance moderado en la distribución de vacunas en la mayoría de los países, menores restricciones a la circulación, efectos secundarios positivos derivados de las economías avanzadas y un aumento en los precios de los productos básicos. Y, aclararon, que estos aspectos también están entre los principales riesgos.
En el contexto de sudamericano, la economía peruana mostraría las mejores cifras de crecimiento, con 10,3% de incremento, sigue la Argentina, luego Chile (6,1%), Colombia (5,9%) y Brasil (4%).
Finalmente, indica el informe, gran parte de la región “tardará mucho tiempo en lograr recuperarse plenamente y volver a los niveles de producción anteriores a la pandemia. Se prevé que en 2022 el PIB per cápita en la región será un 1,5 % más bajo en comparación con su nivel en 2019”.