Argentina trabaja en un plan piloto para la “Certificación Fitosanitaria de semillas de maíz”, comunicaron desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), con destino propagación y propósito experimental.
Este trabajo que el Servicio está llevando adelante con la Asociación Semilleros Argentinos (ASA) se realiza en el marco de la implementación de las “Normas Internacionales para Medidas Fitosanitarias (NIMF) 38”.
Esto se trata de un avance clave para la industria argentina de la semilla que mira firme hacia la exportación de conocimiento y producto. Además es otro indicio del potencial que puede alcanzar la unión público-privada.
Este plan trazado detalla las medidas fitosanitarias requeridas durante el proceso de producción de semillas de maíz con propósito experimental, que muchas veces requiere movimiento entre países, en correspondencia con los requisitos fitosanitarios establecidos por las Organizaciones Fitosanitarias de Protección Vegetal (ONPF) de los países importadores.
permitirá disminuir los costos y la cantidad de semillas que insumen los análisis de laboratorio, en tanto permite certificar los envíos considerando las prácticas que aplica la industria en la producción de semillas con propósito experimental.
“El Plan contempla procedimientos anteriores y posteriores a la cosecha que podrán contribuir a un manejo eficaz del riesgo de plagas”, explicó Diego Quiroga, director nacional de Protección Vegetal del Senasa.