La coyuntura del cultivo del maíz, dependiendo de la campaña que se mire, puede ser de excelencia o baja revisión. En el primer caso, el mercado evidencia el gran momento comercial del grano y, en cambio, en el segundo caso, la nueva campaña aun revisa su intención de siembra para la ventana temprana.
Recientes datos publicados por la Bolsa de Comercio de Rosario marcan que los envíos al exterior del maíz local totalizan 25,4 millones de toneladas en lo que va de la campaña comercial 2019/20 comenzada en marzo.
Ello implica un 13% más que la campaña previa. Asimismo, recalcan que las 4,63 millones de toneladas embarcadas en agosto sería el mes con mayores embarques de cereal de la historia argentina.
De acuerdo a los datos analizados por el consultor Iván Barbero, hay varios datos para considerar en la nueva campaña comercial.
“Tomando en cuenta que para todo el año comercial se proyectan envíos al mundo por 37 millones de toneladas, los inventarios finales 19/20 caerían por debajo de las 2 millones de toneladas y, en función de esto, la relación stock/consumo sería de solamente 3,7%, un hecho que solo se repite en 2011/12“, adelanta.
En este sentido, dice el analista, esto cambió notablemente la percepción considerada de este mercado respecto a hacer tres meses, cuando se había cosechado el 50% de la superficie, momento en el cual la relación stock/consumo excedía el 9%. Este viraje de precios significó que ganancias para el grano de 35 dólares por tonelada para la posición de su valor de este mes.
Otro aspecto importante que agrega Barbero sostiene el continuo fortalecimiento de la demanda, en la que el precio de mes de septiembre es más caro que en diciembre.
“Esto resulta equivalente a aseverar que el mecanismo de precios relativos ha actuado con el propósito de que los productores se desprendan de sus existencias lo antes posible”, afirma.
Asimismo, dice que el fortalecimiento de precios argentinos fue en simultáneo con un encarecimiento relativo frente al Mercado de Chicago, la plaza de mayor oferta de maíz del mundo, lo cual coincidió con el aumento del grueso de la producción argentina.
Sin embargo, ante este escenario beneficioso, Barbero pone ciertos reparos.
¿Cuáles? “Debemos tomar nota que el mercado argentino está expuesto a una fuerte corrección en el mediano plazo, bajo el supuesto de que con el correr de los meses el Mercado de Chicago se estabilice, no descartando que en la plaza doméstica sufra un recorte de precios”.
En este sentido, subraya, cuentas cada vez más tirantes en el mercado argentino de maíz marcaron una tendencia alcista, independiente de la performance de este cultivo en la plaza norteamericana.
Este “rally” sostuvo únicamente en la avidez de la exportación, por ello cuando su consumo se retraiga es más que probable que haga mella en las cotizaciones, básicamente porque a la demanda interna le resulta complejo convalidar estos precios.
Aspectos clave para considerar y obtener los márgenes del cultivo.