Las plantas de interior suelen ser muy delicadas y requieren un mantenimiento periódico. A pesar del amor y tiempo que les dediquemos puede pasar que por una y otra razón a veces se te sequen. Por eso te dejamos algunas recomendaciones para que alargues la vida de tus plantas y puedan así verse más bonitas.
Ubicarlas cerca de la luz o en la sombra
Si querés que tu planta prospere, tenés que ponerla cerca de la ventana para que reciba la radiación solar, aunque lo mejor es responder a las necesidades de cada tipo de planta, es decir, no vas a ubicar un helecho amante de la sombra frente a la ventana.
Elegilas de acuerdo a tus tiempos
Si salís mucho de viaje lo mejor será optar por aquellas plantas tolerantes a la sequía como los cactus y algunas suculentas. No podés tener plantas vigorosas y coloridas si no las regas.
No olvides abonarlas
Fertilizar tus plantas de forma periódica las hará desarrollarse mejor, gracias a todos los nutrientes que reciben y que no pueden obtener del suelo.
Podarlas de vez en cuando
Si ves algunas hojas secas, es momento de cortarlas. Es necesario retirar esas partes muertas para que tu planta crezca de forma saludable y alcance la madurez.
Elegí la maceta adecuada
Al trasplantarla, corroborá que la maceta se pueda drenar fácilmente. No hay algo peor que una planta con las raíces encharcadas. Usá una con agujeros al fondo y cubrí el fondo de la maceta con una capa de piedras pequeñas antes de incorporar la tierra.
Cambiala de lugar cuantas veces sea necesario
Es probable que empiece a crecer más del lado por donde recibe más luz solar, lo mejor es cambiarla de posición o de lugar para que crezca de manera uniforme. Hacelo cada semana y de esta forma vas a asegurar que le llega por todos lados.