Son muchos los controles, protocolos y medidas que se toman en la industria para garantizar que un producto como la carne llegue en perfecto estado hasta los establecimientos. Algunas de estas medidas van desde el establecimiento de sistemas de control basados en el análisis de peligros y puntos de control críticos hasta la creación de atmósferas protectoras o modificadas. Uno de los más curiosos son los papelitos blancos que incorporan algunos envases de carne.
¿Para qué sirven? ¿Son tóxicos, tal y como se comenta en algunas páginas web?
El papel que desempeñan dentro de estas bandejas es el de absorber los líquidos que pueda soltar la carne para evitar que proliferen en su interior las bacterias.
La carne es un alimento especialmente atractivo para algunos microorganismos, que pueden proliferar en ella si no se cumplen unos determinados estándares de seguridad o si, por ejemplo, hay un fallo en la cadena de refrigeración.
Pero entonces, ¿son tóxicos o no son tóxicos estos papelitos?
“La respuesta rápida: no. De hecho, todos los materiales que utiliza la industria, desde el plástico hasta el telgopor, son testados, probados y analizados para que no exista ningún riesgo al estar en contacto con los alimentos. Las almohadillas absorbentes, que están fabricadas con celulosa, no sólo mejoran la seguridad del producto, sino que son aptas para el contacto con los alimentos y absolutamente seguras”, aclaró Gemma del Caño, farmacéutica española y especialista en I+D de la industria alimentaria.
Los expertos señalan que nos encontramos en una época en la que la comida es más segura y de más calidad que nunca.
“Sólo hay que ver la de gente que se moría de intoxicaciones alimentarias hace 30 o 40 años y la que se muere ahora”, señaló José Miguel Mulet, profesor de Biotecnología de la Universidad de Valencia.