VIDEOS: FAA y Juan M Fernández
Varias localidades del Departamento 9 de Julio de la provincia de Santa Fe padecen las graves consecuencias de zonas inundadas producto de las copiosas precipitaciones desde mediados de diciembre, sumado a los efectos del escurrimiento de una gran masa hídrica desde Santiago del Estero y Chaco.
Si bien las autoridades no pueden cuantificar el perjuicio económico, productores federados de la zona se ven seriamente afectados en sus producciones, tal es así que las autoridades provinciales estiman pérdidas totales en la producción agrícola, entre 6.000 y 7.000 hectáreas de algodón.
Asimismo, la zona anegada impide el ingreso para la recolección de lotes de girasol listos para su cosecha. En tanto, preocupa que no puedan realizarse las siembras de soja de segunda y tercera, y habría serios perjuicios para la producción de alfalfa.
Anoche, vecinos de #ElNochero trabajaron a destajo para abrirle paso al agua por debajo de las vías del Belgrano Cargas e impedir que supere el anillo de defensa. Las redes sociales son el canal de comunicación y organización pic.twitter.com/offnTl2njR
— Juan M Fernández (@jotafernan) 8 de enero de 2019
Las mediciones realizadas entre el 7 y 8 de enero, indican en el noreste de la provincia cayeron 65 milímetros en Villa Minetti, 130 en Santa Margarita, 70 en Gregoria Pérez de Denis, 132 en San Bernardo, 118 en Gato Colorado y 15 en Tostado.
La directora del Distrito 12 de Federación Agraria Argentina, Gilda Coria, señaló que en el norte están afectados los pequeños productores federados de la Organización Civil “Campesinos de las 500”, registrando material fotográfico de la gravedad de la situación, debido a los desmontes que provocan la falta de retención de agua y que, como consecuencia de esto, “los pueblos y producciones del norte de la provincia de Santa Fe sufren este flagelo histórico. La foto muestra un zapallar para consumo de la familia, o para vender en el pueblo”.
Coria ratificó la necesidad de los productores de seguir levantando las banderas de la Agricultura Familiar “para luchar contra los desmanejos del suelo, respetar los cursos naturales del agua, que nuestra gente ya lo hizo, convivió con la naturaleza, pero que lamentablemente los que vienen de afuera solo usan de renta a nuestro campos”, señaló.