Después de fundar una empresa productora, procesadora y exportadora de cultivos especiales, el licenciado en Comercio Internacional y emprendedor Jorge Huck se dio cuenta de que el negocio necesitaba una vuelta de tuerca, un agregado de valor, porque la oferta crecía cada vez más, tanto a nivel local como internacional.
Así fue como creó SpringHaus, una firma que procesa y exporta una amplia gama de mezclas e ingredientes para alimentación de pájaros y pequeñas mascotas.
En un trabajo conjunto con Agroinversiones Pampeanas, que se encarga de la originación y compra a campo, y Nelsoni Ranch, especializada en la preparación de mezclas, SpringHaus es una joint venture que busca atender el nicho, que es pequeño pero maneja entre US$ 13 y US$ 15 mil millones por año y tiene una tasa de crecimiento mayor al del PBI mundial, del 4%.
“Argentina siempre ha sido productor de commodities, y ya desde hace unos años es productor de cultivos especiales. En general, al mercado se lo trataba de una forma muy marginal, exportando aquello que era descarte: lo que no daba calidad de consumo humano, se lo mandaba a pájaros. Cuando había lotes malos, se vendía; cuando no, no. Entonces, la oferta era muy irregular, de poco valor agregado, únicamente de ingredientes“, le explicó Huck a Infocampo.
Por eso, con SpringHaus buscó posicionar a Argentina en ese rubro, considerando que los principales jugadores son Estados Unidos, Canadá y el norte de Europa.
La empresa comercializa dos líneas de productos: por un lado, ingredientes, que son los granos tal cual están (por ejemplo, mijo, alpiste, arvejas, lino, maíz, girasol, popcorn, chia, entre otros); por otro, las mezclas, que pueden estar adaptadas a cada animal considerando sus estadíos, o bien según lo pidan los clientes, con packagings especiales.
“No tenemos competencia local, puede haber algunos mezcladores que venden en supermercados o veterinarias, pero el mercado interno es muy chico”, resaltó Huck.
En la actualidad, el mercado de pájaros se divide en animales de compañía, que están en jaulas, y los silvestres, una corriente que crece en el Hemisferio Norte, que consiste en alimentar ejemplares salvajes en el jardín de casas particulares, pero sin enjaularlos.
En ese sentido, SpringHaus elabora para exportar a Centroamérica, Medio Oriente y Sudeste Asiático en una planta ubicada en San Pedro, que si bien es pequeña, busca expandirse en el corto plazo.
“Estamos comprando a diferentes productores. En general son cultivos que tienen que ver con economías regionales. Las zonas principales son Jujuy, Salta, zona Núcleo y sur de la provincia de Buenos Aires”, detalló Huck.
A grandes rasgos, los valores que se manejan en el sector para la exportación son de US$ 1.000 FOB por tonelada en bolsas de 25 kilos, aunque pueden llegar a los US$ 1.500/1.700 para empaques pequeños, siempre dependiendo de lo que pida el cliente.
La firma arrancó a principios de 2018, y tiene planes de crecimiento para este año. Con ventas por US$ 1,5 millones el año pasado, las proyecciones para el actual rondan entre los US$ 4 y US$ 5 millones.
“Aunque los granos son consumidos por animales, quienes toman la decisión de compra son personas muy conocedoras y celosas de lo que sus animales van a consumir. Por este motivo brindar una excelente calidad y apariencia, tanto de empaque como producto, son fundamentales. Desde los envases pequeños de 500 gramos, hasta los de mayor tamaño (50kg) han sido desarrollados para transmitir las mejores virtudes de su contenido”, contó Huck.