Karina Álvarez pertenece a una familia de pequeños productores ganaderos de la Cuenca del Salado. Pero ahora también está al frente de Sauay, una empresa que trabaja en desarrollo de hardware y software con Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) y lanzó un nuevo sistema para monitorear animales en vivo y en directo.
El motivo es que junto a su familia fueron víctimas de uno de los delitos más comunes que se registran en el sector agropecuario en la actualidad: abigeato, o robo de ganado.
“Hace un tiempo encontramos alrededor de 20 corderos carneados, estaban sus cabezas, cueros y vísceras tirados en nuestro campo. Fue un escenario terrible. Parecía una película de terror. No entendimos cómo no escuchamos nada. Dejaron animales atados con hilos de fardos, que luego murieron porque estaban golpeados. Todo sucedió por la noche, a la madrugada. Llamamos a la policía, tomaron la denuncia, vino la patrulla rural, pero fue muy desfasado del tiempo. No se pudo hacer nada“, le contó Álvarez a Infocampo.
Según la productora y empresaria, otra de las modalidades de hurto comunes en la zona son los “robos hormiga”. “Te llevan uno o dos animales de un lote y, a simple vista, pareciera que están completos, pero luego uno se da cuenta de que faltan, y nunca se encuentran. No están ni en potreros vecinos ni nada. Los juntan con otro grupo u otro lote, los mandan a remates o los carnean y los venden en la carnicería“, lamentó.
Ante estas problemáticas, hace un año y medio decidió impulsar SisLa, o Sistema de Monitoreo GPS para la hacienda, que pretende solucionar los robos y los inconvenientes con la hacienda en los potreros, sobre todo en casos de cuatrerismo.
“Lo más complicado es detectar el momento exacto en el que está ocurriendo algo con un animal, no poder acceder a sitios por falta de caminos o la dificultad de la policía para llegar y captar a los delincuentes con las manos en la masa“, analizó Álvarez.
Carlos Pereyra, ingeniero de la firma, destacó que SisLa genera datos de GPS y pulso. “Por ejemplo, se puede saber cuándo el ganado está saliendo de una zona geográfica permitida, lo que podría significar que lo están robando. En tanto, con el pulso podemos saber si lo están carneando, porque lo deja de tener”, aseguró.
Asimismo, el sistema cuenta con relevamiento de aspectos como vacunación, alimentación e historial de cada animal, y hasta también permite ver el estado de ánimo. Con metadata, analiza las variables y permite así que el ganadero pueda tomar decisiones con anticipación.
“Como el ambiente de campo es hostil para este tipo de sistemas, sobre todo en temas de comunicación por la falta de wifi y conexiones, utilizamos la tecnología LoRa“, resaltó Pereyra.
Pero para el experto, lo mejor del sistema es el equipo que lo desarrolla. “Tenemos capacidad de comprender las necesidades del ganadero, por haber estado cerca del día a día”, concluyó.