Luego de comprarle en noviembre pasado varios activos por 5.900 millones de euros, la empresa Basf adquirió la unidad de negocios de semillas de hortalizas de Bayer, lo que incluye además el tratamiento de semillas, una plataforma sobre agricultura digital y desarrollo e investigación sobre semillas de trigo.
La operación se da en el marco del proceso de desprendimiento de distintas divisiones que Bayer realiza para poder acceder a la compra de Monsanto. Asimismo, la compañía química sumó la unidad de negocio de la colza que Bayer tiene en Australia, algunos herbicidas a base de glifosato en Europa, que se utilizan para aplicaciones industriales, y la investigación de canola calidad juncea.
“Con esta adquisición, Basf será un socio más completo para los productores, fortaleciendo su portafolio de protección de cultivos e ingresando en el negocio de semillas en los principales mercados agrícolas. A través de la extensión del acuerdo, estamos acelerando y ampliando la base para el crecimiento en todas las regiones”, expresó el presidente del Consejo Administrativo de la empresa, Kurt Bock.
Bock señaló además que “todas las transacciones dependen de la finalización de la adquisición de Monsanto por Bayer, esperada para el segundo trimestre de 2018“.