“El crecimiento de la producción agrícola trae aparejado una mayor demanda de camiones, acoplados, tolvas, pick ups y un montón de otros productos que se fabrican con el acero. Nuestra relación con Expoagro ya lleva más de 10 años y nos ha permitido transmitir la importancia que tiene el campo para la industria”, asegura el director general de Ternium Argentina, Martín Berardi.
En la edición 2018, que se realizará del 13 al 16 de marzo en el KM 225 de la Ruta Nacional 9, en San Nicolás, la compañía será nuevamente sponsor oficial y tendrá su clásico stand institucional donde expondrá los desarrollos que fueron premiados en la última edición del Premio Ternium-Expoagro a la Innovación Agroindustrial, que se realiza cada dos años y cuya próxima entrega se realizará en 2019. “Nos sorprende la constante incorporación tecnológica que lleva adelante la agroindustria y este premio tiene mucho impacto en la difusión de las diferentes invenciones que hacen las empresas”, destaca Berardi.
Según el ejecutivo, durante 2017 se incrementó un 11% interanual la demanda de acero y proyectan un alza similar para este año. “Somos optimistas en este 2018, donde esperamos que después de mucho tiempo tengamos dos años consecutivos de crecimiento de la economía nacional”, dice.
Berardi detalla que el 45% de la producción de acero es destinada a la construcción y el restante 55% al resto de los sectores industriales, donde el campo ha tenido un papel fundamental. “La agroindustria hoy ha vuelto a representar entre el 7% y 8% de nuestras ventas, que siempre fue el porcentaje histórico, luego de haber bajado al 4% o 5%. La producción de maquinarias llegó a casi duplicarse tras haber pasado por años muy malos. Además vale destacar que el agro empuja al crecimiento de otros sectores. Por ejemplo, cuando se hacen más galpones lo contamos en el rubro de la construcción, pero en realidad el agro también está impulsando algunas de esas obras”, aclara.
Durante el año pasado, Ternium invirtió unos 100 millones de dólares en áreas relacionadas al medioambiente, calidad de producto y actualización tecnológica. “Cambiamos toda la motorización del laminador y aumentamos su potencia, que a largo plazo va a significar mayor producción”, expresa.
No obstante, Berardi considera que el país todavía tiene algunos desafíos por delante para aumentar su competitividad, como corregir el atraso cambiario y reducir la carga impositiva. Aunque aclara que las buenas perspectivas económicas hacen que igualmente estén analizando algunos proyectos de inversión que oscilarían entre los 400 y 500 millones de dólares. “Estudiamos aumentar la capacidad de producción de chapas galvanizadas, de chapas prepintadas y del laminador”, anuncia.
Por último, Berardi remarca el desarrollo de la compañía en toda la región, junto con la renovación de la imagen de marca. “La siderurgia está atravesando un ciclo positivo en el mundo y todas las operaciones anduvieron mejor en 2017. Somos especialmente optimistas en México, que de Latinoamérica es el país más competitivo para la fabricación de manufacturas. Además, gracias a la planta que recientemente adquirimos en Brasil, pasamos a ser el principal operador siderúrgico de la región. Por eso, este año dejamos de ser Siderar para llamarnos Ternium Argentina, con la idea de darle fuerza y sentido de pertenencia a nuestra marca”.