La cría casera de gallina ponedora puede ser considerada como una actividad para generar ingresos extra, principalmente con la venta de los huevos.
Según informa el INTA con una buena alimentación y atención de las aves, 10 ponedoras pueden producir en promedio media docena de huevos por día durante casi todo el año. Para esto se necesita alimento, un pequeño gallinero, luz en invierno y una buena raza de ponedoras. Como el alimento es el costo más importante en la producción de huevos, se contempla que parte de este sea producido en la huerta.
La importancia del agua
Es fundamental en épocas de calor ya que pueden consumir hasta medio litro de agua al día. Deberá de disponer un bebedero en el que las gallinas no puedan meterse para evitar infecciones, y el agua deberá estar siempre limpia. En caso de faltarles el agua, dejan de poner huevos inmediatamente.
Alimentación
Un comedero debe ser lo suficientemente grande para que puedan comer todas las gallinas.
Se alimentan principalmente de granos de maíz. Si disponemos de una huerta o espacio para ello, sería ideal que las gallinas pudieran andar libres buscando insectos, plantas o semillas que comer.
Huevos
A partir de los 5 o 6 meses de edad, una gallina debería empezar a poner huevos, llegando al máximo de posturas a los 2 años, a partir de entonces la producción de huevos comienza a descender de forma gradual.
Una gallina puede llegar a vivir unos 15 años, pero dependerá siempre de las condiciones en las que se encuentre y de la raza.
Los huevos que recojamos estarán generalmente limpios, en el caso que estén ligeramente sucios, podemos limpiarlos en seco. Se recomienda no enjuagar o “lavar” los huevos ya que se eliminan la cutícula que ayuda a conservar su frescor.
Requerimientos
Para que las gallinas pongan huevos deberán tener como mínimo 14 horas de sol diarias, por lo que es importante orientar el gallinero para obtener luz.
Es importante que tengan un lugar para que puedan dormir. Prefieren dormir en las alturas. En caso de contar con pollitos, se recomienda por las noches encerrarlos para prevenir el ataque de depredadores.
Cama de pollo
Es el abono orgánico que más nutrientes aporta a las plantas, es rico en minerales y proteínas. Surge a partir de las excretas de las gallinas. Sin embargo, por contener mucho nitrógeno, conviene mezclarlo previamente con restos vegetales y estiércol de otros animales para obtener un compost de alta calidad.