Foto: Von Sprecher de Diario de Río Negro
La zona de Allen, en la Costa Oeste de Río Negro, fue escenario de un espeluznante hecho el pasado fin de semana. Es que el domingo hallaron en la zona de ribera el cadáver de un caballo quemado completamente a la intemperie, lo que despertó las quejas de los vecinos por las enfermedades que podría transmitir.
Según indicó el diario de Río Negro, hay testigos que dicen haber visto a un hombre cruzando el río con el animal desde la margen sur hacia el barrio, y sospechan que su corazón no habría soportado el esfuerzo. Es más, también aseguran que el mismo propietario habría recolectado leña para prenderlo fuego.
Lo cierto es que, con el cuerpo en descomposición, nadie lo enterró, por lo que el equino permanece en la zona y cada vez se le acercan más perros e insectos.