La siembra de girasol avanzó 2,4 % esta semana gracias a las buenas condiciones que se presentaron en los núcleos del norte y centro del país, y ya se implantaron más de 650.000 hectáreas. Así, el progreso nacional de siembra alcanzó el 34 % de las 1.800.000 hectáreas proyectadas para esta campaña, cifra que reflejaría un crecimiento del 5,9 % en comparación al ciclo anterior (superficie Girasol 2016/17: 1,7 M has), de acuerdo a lo informado por el Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).
En los últimos días, el PAS relevó las últimas incorporaciones de lotes tardíos en el Centro-Norte de Santa Fe, dando por finalizada la siembra en esa región. En tanto, los lotes ya implantados transitan etapas vegetativas, desde emergencia hasta diferenciación foliar, mientras una pequeña proporción de cuadros tempranos comenzaron a desarrollar el botón floral, según el relevamiento de la BCBA.
Región por región según el PAS
En el centro del Chaco, gran parte de los lotes de girasol implantados se encuentran diferenciando entre 4 y 8 hojas (V4-V8) bajo una humedad que varía entre regular y adecuada. La presión sanitaria es normal, aunque se relevó presencia de orugas defoliadoras que fueron controladas con aplicaciones terrestres durante la última semana.
Por su parte, la siembra de girasol finalizó en el Centro-Norte de Santa Fe luego de efectuarse las últimas labores en las localidades de Reconquista, San Guillermo, Videla, Franck y Maria Juana. Esta región registró una expansión del área girasolera del 13 % en comparación a la campaña 2016/17, que en números absolutos corresponden a 30.000 hectáreas.
Por otro lado, la siembra avanza a paso lento en el centro del área agrícola, más precisamente en el Centro-Norte de Córdoba, Núcleo Norte y Centro-Este de Entre Ríos, regiones que en conjunto aportarían sólo el 1,3 % de la proyección nacional. La condición de humedad es adecuada para la siembra de la oleaginosa y ya se relevaron las primeras emergencias en aquellos lotes incorporados durante las semanas previas.
En la provincia de Buenos Aires restan pocas semanas para el inicio de la campaña girasolera y la condición de humedad excesiva continúa afectando a los lotes que podrían ser implantados con la oleaginosa. Si bien no se registraron nuevas precipitaciones durante los días previos, la falta de piso y el anegamiento que presenta gran parte de la región podrían afectar a la proyección actual de siembra. De esta manera, el área final que ocuparía el girasol en Buenos Aires dependerá de cómo evolucione el clima durante el mes de octubre y del estado hídrico de los lotes al momento de la siembra, señaló el PAS.
