Un informe del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC) destacó que en julio la faena de ganado bovino aumentó casi 4% intermensual al alcanzar las 1,06 millones de cabezas, con el promedio más alto en lo que va del año.
“El crecimiento de la oferta en parte se ha volcado al mercado local, por lo que a julio de este año se ha registrado un consumo de carnes bovinas per cápita cercano a los 57 kilos por habitante por año, 3% superior al de 2016”, expresó el titular de ABC, Mario Ravettino.
Por otro lado, el relevamiento indicó que en los primeros siete meses se sacrificaron 7,1 millones de bovinos, lo que representa el 7% más que igual período del año pasado, mientras que entre agosto de 2016 y julio de 2017 la cantidad de animales sacrificados superó las 12,2 millones de cabezas, con un incremento del 5% con respecto a la misma fecha de 2015/16.
En ese sentido, Ravettino señaló que “el nivel alcanzado es 3,6% inferior al promedio de la última década, pero debe destacarse que ello está fuertemente condicionado por el deterioro experimentado en los últimos años”.
“En relación a los registros de mediados de la década del 2000 (8 millones de cabezas en promedio), el total sacrificado está aún un 11% por debajo”, advirtió, y aclaró que “todo indicaría que el ejercicio 2017 cerrará con una faena de ese orden y similar a la de 2015”.
En cuanto a la proporción de hembras en el total sacrificado, ABC remarcó que fue de 42,3%, “aún alta pero por debajo de los registros de los dos últimos meses”. Esto se debe a la finalización del proceso de depuración de los planteles de vacas, algo habitual en invierno.
“Será preciso monitorear si esta tendencia se sostiene en el tiempo, para ver si toma nuevamente impulso la recomposición del rodeo bovino que se interrumpió en los últimos meses”, dijo Ravettino.