En el marco de la primera reunión del año de la Mesa Nacional de la Cadena Olivícola, dirigentes de la actividad y funcionarios nacionales y provinciales analizaron la situación del sector y las herramientas que necesita para aumentar la competitividad y potenciar su producción.
Durante el encuentro, que encabezaron el secretario de Agregado de Valor, Néstor Roulet, y los subsecretarios de Alimentos y Bebidas, Mercedes Nimo y de Agricultura, Luis Urriza, se abrodaron temas vinculados al financiamiento a través del FONDAGRO, la participación de nuestro país en el Consejo Oleícola Internacional (COI), la promoción externa de aceitunas y aceite de oliva, el control de la genuinidad en el mercado interno, los programas de Agregado de Valor con los que cuenta el Ministerio de Agroindustria, la generación de información sectorial, el Plan Sanitario y el calendario de eventos para el resto del año.
“Hicimos un resumen de lo que sucedió este año desde la primera mesa olivícola, donde planteamos la baja en las retenciones a las economías regionales y el aumento de los reintegros de exportaciones por un lado, y por otro la falta de competitividad que es en lo que tenemos que trabajar con herramientas como el Fondo Nacional de Agroindustria (FONDAGRO). Es una cadena que tiene grandes posibilidades productivas tanto en el mercado interno como en el internacional”, contó Roulet.
Por su parte, Nimo presentó los objetivos de Agroindustria respecto al sector productivo nacional y manifestó que “el sector olivícola es estratégico para las economías regionales y que destina casi un 80% de toda su producción al mercado internacional, es una de las cadenas que más tiene posibilidad de agregar valor de manera rápida, que genera empleo porque en su mayoría son pymes, y que necesita potenciar su competitividad y buscar el concepto de una inserción inteligente en el mercado internacional”.
Urriza, en tanto, aseguró que “la Mesa Nacional Olivícola viene trabajando muy bien tanto en la difícil coyuntura de la cadena así como en las buenas perspectivas que tiene a futuro. El Ministerio de Agroindustria, a través de muchas de sus áreas, desde la Subsecretaría de Agricultura y la de Alimentos y Bebidas, viene acompañando fuertemente estas iniciativas”.
Uno de los puntos que más se destacó fue el vinculado con la genuinidad de los aceites de oliva que se comercializan en el mercado interno. Según indicó la cartera que conduce Ricardo Buryaile en un comunicado oficial, “para eso se está haciendo un trabajo en conjunto con el Instituto Nacional de Alimentos (INAL) donde se presentó un plan para realizar el control en todo el país, contando con la colaboración de los gobiernos provinciales y de laboratorios que pertenecen a la RENALOA (Red Nacional)”.
“El objetivo trazado para las próximas reuniones del organismo será el de impulsar la cadena de valor y llevar adelante una labor conjunta en las negociaciones que permita colocar al país competitivamente en el mercado internacional”, señaló el Ministerio.
Las exportaciones de aceite de oliva durante los primeros cinco meses de 2017 respecto del mismo período del 2016, tuvieron un crecimiento en volumen del 16,8%, alcanzando las 5.222 tn, en valor del 21%, superando los 20 millones de dólares y el precio por tn exportada creció un 3,7%, llegando a 3.978 US$/tn.
