La decisión de la Corte Suprema de Justicia referida a las tarifas de gas, ha sorprendido negativamente a la pequeña y mediana empresa que se siente desprotegida frente a la arbitrariedad de aumentos tarifarios que en muchos casos pusieron en tela de juicio la supervivencia de miles de fuentes genuinas de trabajo.
Nadie discute la necesidad de actualizar tarifas absurdas; pero en cuadro recesivo, los aumentos anunciados y replanteados significaron golpes difíciles de absorber por las economías de las PYMES. Al mismo tiempo, hay que poner en claro que los principales beneficiarios de las tarifas subsidiadas fueron los grupos concentrados.
La CAME señala que donde corresponda, encaminará las medidas cautelares para defender la producción y el trabajo.
Por Osvaldo Cornide. Presidente de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME)