El coordinador de planes de Gobierno para la agroindustria del frente Cambiemos, Ricardo Negri, aseguró que “hay un sobrestock interno de leche que carcome el precio”. En una entrevista con el suplemento Agrovoz, el ex asesor de la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (Aacrea) analizó la actualidad de la lechería e informó qué medidas piensa tomar el gobierno de Mauricio Macri si triunfa en el balotaje del 22 de noviembre.
– ¿Cuál es el diagnóstico que hacen sobre el problema de la lechería?
– Hoy por suerte estamos mejor que hace un mes porque los precios internacionales subieron un poco, empezó a fluir algo de leche a nivel internacional y eso baja nuestros stocks que es el principal problema. Nosotros teníamos pensado todo un set de medidas de largo plazo para la lechería que tenía que ver con crédito, amortización acelerada de inversiones, estimular el trabajo dentro de los tambos y empresas lácteas, pero tuvimos que poner el GPS en recalculando dadas las caídas de los precios internacionales y de los precios internos superior a los internacionales. El principal problema es que hay un sobrestock interno que carcome el precio.
– ¿Qué medidas tienen previstas para solucionar estos problemas?
– La lechería entra dentro del plan de inserción de Argentina en el mundo que tiene que ver con bajar las retenciones, eliminar los ROES y propiciar la rápida inserción mundial, con trabajos de Senasa, Cancillería y agregadurías agrícolas. De todos modos, algo puntual para ver de la situación es cómo van a estar las relaciones de precios y stocks para fin de año y tomar decisiones en función de eso. No vamos a decir cuál va a ser la medida única porque va a depender de cómo siga evolucionando el mercado que en los últimos días viene evolucionando favorablemente. El plan de largo plazo no se cambia, pero a corto plazo las medidas las vamos a ir tomando en función de lo que pase en ese momento.
En cadena
– ¿Apuntarían a mejorar el precio a los productores o un trabajo con la industria?
– A la lechería hay que cuidarla y mirarla desde toda la cadena, no sólo desde los productores, porque en este contexto los productores son los que están pasando la peor parte pero hay una parte de las pymes lácteas que también están pasando por un momento complicado por el aumento de costos, la competitividad, el aumento de precios relativos. Por ejemplo, en el tema transporte, tenemos el petróleo más caro de la región y eso incide sobre los fletes y con un impacto alto en la cadena láctea.
– ¿Cómo se hace para abordar toda la cadena?
– Nuestra mirada es de toda la cadena y no de eslabón aislado por eslabón aislado como ha sido hasta ahora. La mirada de los eslabones aislados lo que ha generado es ganadores y perdedores, y de manera discrecional. Entonces los perdedores produjeron menos, desaparecieron empresas. Como sistema han hecho locuras, este gobierno es un muestrario de macanas en la cadena agroalimentaria. Eso es lo que no queremos hacer, porque ya vimos qué pasa.
– ¿Una quita de las retenciones al maíz no podría ser perjudicial para los tambos?
– Seguramente la baja de las retenciones en maíz va a afectar en los costos de algunos de los sectores pero también va a generar mayor oferta de maíz. La intención de siembra subió en los últimos 15 días. El costo individual puede generar un problema pero tenés una oferta mucho más grande. El problema hasta ahora es que no íbamos a tener maíz y eso era mucho más grave. Además, si también se toman las medidas de bajar retenciones y eliminar ROE para los otros sectores, mejoran los precios y la capacidad de pago en toda la cadena.
– ¿Qué opinan del cambio de discurso de Scioli que ahora hizo anuncios más concretos para el agro?
– Desde abril de 2014 el PRO viene hablando de bajar las retenciones a todo menos la soja y en soja hacerlo gradualmente. Seguimos pensando y diciendo lo mismo y estudiando y haciendo las cuentas sector por sector, cadena por cadena y lugar por lugar. No veo haciendo lo mismo a los equipos que están en otro lado. Me encantaría poder debatir, intercambiar ideas con alguien que piense distinto, pero no es así, lo están diciendo pero no haciendo.
