La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) afirmó hoy que pese al temor inicial de que el episodio de “El Niño” cobrara “proporciones inéditas, capaz de causar efectos catastróficos”, durante septiembre “su velocidad de desarrollo se moderó, tendiendo a estabilizarse”.
Por esta causa, si bien se ubicará entre los más intensos observados hasta el momento “es probable que su intensidad no logre superar significativamente a los que lo precedieron”, indicó.
Según explica el informe, esta atenuación es producto del ascenso hacia el Norte, “de la Corriente Fría de Las Malvinas”, que provocó una baja en el inusual nivel térmico de la Corriente Cálida del Brasil.
No obstante, “debe recordarse que todos los episodios de “El Niño” precedentes presentaron riesgos hidrológicos de consideración, tanto por la crecida de los grandes ríos de la Cuenca del Plata, como por el anegamiento de áreas bajas con drenaje reducido, como la Cuenca del Salado de Pcia de Buenos Aires”, advierte la BCBA.
En el plano agronómico, se destaca que en “los anteriores episodios, el ambiente cálido y húmedo determinado por el fenómeno, promovió los ataques de enfermedades y plagas, y favoreció la proliferación de malezas, a la vez que las frecuentes precipitaciones obstaculizaron las labores agrícolas, y generaron gastos adicionales de acondicionamiento, almacenaje y transporte de la producción”.
Por último, y como aspecto positivo, cabe también mencionar que, en todos los episodios de “El Niño” precedentes, “los volúmenes de producción de los cultivos estivales alcanzaron valores récord”, destacó.
Para tener en cuenta
Entre las conclusiones, los técnicos de la BCBA aseguran que “debido a la compleja interacción de factores que dominan el clima sudamericano, debe esperarse una sucesión de escenarios contrapuestos, que se irán sucediendo a lo largo de la temporada”.
Además, sostienen que “las cuencas de los ríos de Llanura (como las del Río Salado de la Pcia. de Buenos Aires y de Santa Fe) se mantendrán en riesgo de inundaciones debido a la posibilidad de que se produzcan fuertes lluvias locales”.
En tanto, “las zonas ribereñas bajas del Litoral Fluvial se verán expuestas a las crecidas de los grandes ríos debido a precipitaciones abundantes que se producirán en sus cuencas, tanto en los tramos inferiores, dentro del país, como en sus altas cuencas, ubicadas fuera del país, en territorio de Bolivia, Paraguay y Brasil”.
Finalmente, la entidad insistió en que “las irregularidades exhibidas por el agroclima durante las últimas campañas agrícolas, tanto a nivel nacional como internacional, indican que no es prudente hacer cálculos exitistas, y que debe dejarse siempre un margen de seguridad en las proyecciones económicas y productivas que se realicen”.