“APYMEL advirtió a ATILRA de la gravedad de la situación y el sindicato, haciendo oídos sordos, decidió con las grandes empresas un inoportuno acuerdo salarial que, por responsabilidad, APYMEL decidió no convalidar”, comienza diciendo el escrito que la entidad le entregó al Gobierno, a modo de propuesta. “Muy a nuestro pesar, nos vemos necesariamente obligadas a trasladar al sector productivo primario la nueva realidad del mercado”, indica APYMEL, según publicó el portal Nuestro Agro.
En otro apartado, APYMEL enfatiza que “fábrica y tambero son, dentro de la cadena láctea, quienes no pueden evadir sus producciones, lo que los convierte en financiadores del sistema, con una torta de reparto que cada vez se hace más chica”. Y acusa: “el sector comercial no tiene solidaridad con los costos de producción y sí tiene la facultad de decidir no comprar cuando el precio no le conviene; además, no traslada los menores costos en menores precios al consumidor”.
Pero sin dudas el dato más llamativo de este comunicado, es el referido al poderoso gremio ATILRA, que hace unas semanas acordó su paritaria con un aumento del 31% y sumas adicionales por un total de $ 26.000 por trabajador. Este acuerdo no fue suscripto por APYMEL sino sólo por las grandes empresas del sector, aunque rige para todo el eslabón industrial. Según las pymes, a ATILRA se le explicó que “el crecimiento estacional esperado en la producción de leche para los próximos meses, sumado a los elevados stocks y la imposibilidad de exportar a precios rentables por la brutal caída de los precios internacionales, generan una alerta; que las pérdidas proyectadas son inmensas y exceden en varios órdenes de magnitud a lo que el sistema industrial puede soportar”.
En esta coyuntura, para la entidad de las pymes, el mercado interno es el único que puede sostener el precio al productor, calculando que el mercado exportador (20% del total) da para abonar sólo 1,04 $/litro de leche cruda, mientras que los precios pagados en el mercado doméstico (80% del total), están dando para pagar 3,20 $/litro. Esta ecuación, hoy daría un valor real del precio de la leche en tranquera de tambo de 2,77 $/litro. Por esta razón, “con una combinación de mercados, donde el mercado interno puede sostener los precios, debemos salir a protegerlo, donde todos los esfuerzos tienen que estar enfocados en sacar el excedente de cualquier manera al exterior; cualquier otro esfuerzo que se haga diferente a esto tendría consecuencias impredecibles”, opina la entidad que preside Pablo Villano.
Por todo lo expuesto, APYMEL solicitó al Gobierno “las siguientes medidas para paliar la situación”:
· Decretar la emergencia del sector.
· Actualizar convenio laboral acorde a la realidad, diferenciando al sector PYME de las grandes industrias.
· Suspender el acuerdo firmado entre el CIL y ATILRA para disminuir la carga salarial a las industrias.
· Implementar en forma urgente un subsidio a la exportación.
· Establecer reducciones en el pago de impuestos y/o cargas sociales, IVA, implementación de REPROS, más devolución inmediata del IVA de exportaciones.
· Apoyar con reintegros de exportaciones con porcentajes no inferiores al 10% para quesos y leche en polvo y 20% para suero en polvo, atendiendo al descalabro ambiental que implica hoy no poder exportarlo.
· Ofrecer financiamiento a las empresas a tasa 0 para capital de trabajo, como se hizo en una oportunidad a través del Banco Nación (sector triguero).