Los ensayos se llevaron a cabo durante las campañas 2006/2007 y 2007/2008 en las localidades de Coronel Dorrego, Pellegrini, Tres Arroyos, Tres Lomas y Trenque Lauquen (Bs. As.), en General Pico y Dorila (
En lotes de ensayo, los mejores rendimientos en Buenos Aires fueron en Pellegrini y Trenque Lauquen, con promedios de 3.360 y 2.568 kg/ha respectivamente. En Dorila, el promedio se ubicó en 2.860 kilos, y en Charata promedió 2.400 kg/ha.
El manejo de fertilización aplicado en los lotes fue de 50 kg/ha de fosfato diamónico, 80 kg/ha de urea y protección de área foliar sobre floración, inicio y llenado de grano mediante fungicida foliar.
Martín Díaz Zorita, de Nitragin, explicó que se buscaron híbridos que aportaran alta producción y estabilidad, y valor diferenciado, a partir de la incorporación de genética CL y alto oleico.
Para estudiar los factores limitantes del cultivo, en el planteo original con fosfato diamónico y urea, se eliminó la fertilización de base, y en pasos sucesivos, la protección foliar. En total, se realizaron tres planteos diferentes de fertilización. En cuanto a densidades de siembra, Zorita destacó que en el manejo completo, (fertilizante y protección foliar) se aumentó en un 30% la densidad de siembra original, que era de 50.000 plantas/ha: “Este incremento generó mejoras en el rendimiento de hasta un 4%”, manifestó.
En la producción final, Zorita destacó que los factores más influyentes son la elección de sitio, híbridos y estructura del cultivo. “Sin fertilización, los rendimientos fueron menores, y hubo una moderada reducción en ausencia de fungicidas foliares. En el futuro deberá cuantificarse la heterogeneidad ambiental y sus factores definitorios”, sostuvo.