La liquidación de divisas por exportaciones de granos, harinas proteicas y aceites vegetales cayeron un 17% en marzo con respecto a febrero, cuando ‘por estacionalidad y el incremento de las retenciones a la soja y el girasol’ debería haber aumentado de manera sustancial. Las causas: cientos de embarques comprometidos que no pudieron concretarse por el paro agropecuario. Entrevista a Alberto Rodríguez, director ejecutivo de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-Cec).
-¿Ya sienten la falta de grano, cuánto tiempo más aguanta el stock?
-Antes que comenzara el paro los exportadores intentaron acopiar la mayor cantidad posible. No tenemos números concretos, porque hay realidades distintas. Hay empresas que tienen sus propios puertos y los hay de distintos tamaños, por lo que algunas todavía tienen más granos que otras. Luego están los puertos múltiples como los de Necochea o Bahía Blanca, allí ya casi no queda. Pero tenemos otros problemas, por ejemplo, hay empresas que tienen stock a 100 kilómetros del puerto, pero por el paro no pueden acercar el grano. Mientras que hay aceiteras que tienen grano pero ya no pueden producir más aceite porque no tienen dónde guardarlo porque por el corte de rutas no pueden sacar la producción de la planta. Usted sabe que no pasa ni un camión si lleva grano o aceite.
-¿Podría explicarnos qué es lo que registra la liquidación de divisas?
-Nosotros primero traemos dinero del exterior, eso es lo que se registra, y recién después lo aplicamos a embarques, en los hechos funciona como una prefinanciación. Por eso la liquidación de determinada semana puede dar alta, aunque los embarques hayan caído. A esto se suma que se traen dólares para pagar las retenciones, usted sabe que la Aduana cobra el 40 por ciento de retenciones antes de que se concrete la exportación, hay que pagarlo para obtener el permiso.
-¿Para hacer estas operaciones, importan billetes? Porque una de las acusaciones fue que escaseó el dólar en la plaza porque no estaban liquidando divisas los exportadores’¦
-Esa es una de las tantas falacias que circulan. No traemos billetes, se trata de operaciones electrónicas, que se realizan a través de los grandes bancos que se dedican a esto, como ser el Rabobank. Lo que debería preguntarse la gente es quién compró 1.000 millones de dólares en estos días. No fuimos nosotros y no son los pequeños ahorristas.
-¿Usted quién cree?
-Pueden ser los importadores, y sería algo natural. Si usted tiene que traer supongamos muñecas, tornillos, lo que sea, y ve que el dólar está subiendo, se anticipa y compra dólares para cubrirse.
-¿Si ustedes no tuvieron nada que ver, ¿por qué corrió la versión que faltaban dólares?
-Hay muchos elementos a tomar en cuenta, más allá de cómo den los números macro. Por ejemplo, las petroleras pueden dejar en el exterior parte de las utilidades, y las mineras pueden dejar afuera todo.
(Entrevista publicada en la edición de hoy de El Federal)
