âIndirectamente, este subsidio es un excelente recurso antievasión, porque todo aquel que haya operado en la clandestinidad ahora tiene un castigo, ya que para acceder al subsidio hay un cupo máximo que es el promedio mensual del año pasadoâ, opinó José Luis Marino, empresario molinero radicado en la localidad bonaerense de Carhué.
Marino se refería al sistema anunciado por el gobierno nacional, respecto de un reembolso entre el precio de abastecimiento para el trigo, fijado en $370 y un precio a productor, calculado por la Secretaría de Agricultura sobre la base de los precios internacionales, de $440 por tonelada.
En este esquema, la molinería pagaría 440 $/t al productor y luego el Estado le devolvería los $70 restantes. âEn la medida en que el precio del trigo se mantenga en 370 $/t, aquel que negreó y declaró poca molienda no va a sufrir ningún impacto negativo, pero si el cereal en el mercado se va a 430 o 440 $/t, entonces va a requerir el subsidio y ahí va a estar en el horno, porque la ONCCA (Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario) no reintegrará aquello que no está justificadoâ, explicó el industrial. Entre los industriales hay expectativas por ver cómo funciona el sistema, que ya fue reglamentado por la ONCCA, la semana pasada.
Está previsto que los molineros presenten las compras de trigo debidamente justificadas por boletos inscriptos en las bolsas de cereales, en los cinco primeros días del mes siguiente. La ONCCA realizaría el reintegro 15 a 20 días más tarde, según explicó Marino.
âSi esto funciona así, nos daría la posibilidad de negociar con los productores el pago de los 370 $/t en los plazos normales y el resto contra el reembolso, o incluso hasta se podría soportar esos días desde la empresa. Es un tema que hay que estudiarloâ, explicó el empresario ante la consulta de Infocampo.
La idea de la SAGPyA es que los 440 $/t actúen como un precio sostén del cereal (actualmente se negocia en torno de los 375 $/t) y que la exportación termine validando esos precios. Igualmente, hoy por hoy y hasta ver el sistema funcionando, Marino se inclinaría por comprar el cereal al precio de mercado y despreocuparse âde la incertidumbre que crean estos tipos de mecanismosâ.
El empresario agregó: âLa forma en que el gobierno pague y los plazos que se tome afectan especialmente a las pequeñas empresas, que no tienen espaldas financieras para manejar plazos largosâ.
El Primer día, sin reacción
âEl trigo disponible sigue clavado en $375â, decía este lunes el informe de la corredora Roagro, al cierre de las operaciones. De esta forma, en el primer día de negocios granarios, luego de conocido el precio âsosténâ de 440 $/t sugerido por la SAGPyA, nada parecía haber cambiado.