La norma que cuenta con el apoyo explícito del bloque mayoritario del Frente para la Victoria, además prevé fijar en el 10,5 por ciento el IVA del pan -hoy exento- con el fin de resguardar los costos en esta cadena productiva.
La rebaja del IVA es reclamada por los molinos harineros -agrupados en la entidad que los nuclea- para combatir la evasión y el trabajo en negro que en el sector bordea el 40 por ciento, segun indicaron fuentes del sector industrial.
El proyecto iba a ser tratado en principio en la Cámara alta, pero el titular de la Comisión de Presupuesto del Senado, el justicialista Jorge Capitanich, decidió darle de baja debido a que la norma modificaba la alícuota de un impuesto nacional y Diputados es la Cámara iniciadora en ese rubro.
Desde el oficialismo la imposición del IVA al pan y la rebaja a la mitad a la harina de trigo es defendida como parte del combate contra la evasión en el sector molinero que, según se aseguró, se comprometió a no subir los precios.
En el mismo sentido, los representantes del Frente para la Victoria, al igual que sus pares de Diputados, sostuvieron que la norma que mañana se convertirá en ley no repercutirá sobre el precio del pan
