Ante el aumento de la superficie sembrada con soja y la consecuente caída del área destinada a los demás cultivos, técnicos de diferentes empresas y organismos públicos como el INTA desarrollaron el concepto de intersiembra que consiste en sembrar dos cultivos en un mismo lote durante el período en el cual se sembraría tradicionalmente uno solo. El ingeniero Esteban Bojanich, de la firma BASF, indicó que en el país hay 15.000 hectáreas sembradas bajo esta modalidad. En estos casos se pudo verificar que, si bien con este sistema disminuye el rendimiento por cultivo, las empresas que la aplicaron obtuvieron un mayor ingreso neto por hectárea que en los lotes sembrados con un solo cultivo.
Bojanich comentó que la firma El Tejar sembró en el último año 10 campos, algunos con intersiembra de soja y girasol y otros con maíz y soja también con la misma técnica. El primer caso el ingreso neto por hectárea fue de u$s434; mientras que en los lotes sembrados sólo con girasol fue de u$s 402, y en los de soja u$s380 por hectárea. Con el uso de la intersiembra la empresa obtuvo u$s32 más que en la producción sólo de girasol, y u$s54 más que en la de soja. La ganancia subió 7% en el primer caso y 12% en el segundo. En la intersiembra de maíz con soja el ingreso neto fue de u$s584 por hectárea; mientras que en la siembra de maíz fue de u$s 413, y en soja de 380 dólares. El Tejar ganó u$s171 más que en la siembra de maíz, y u$s204 más que en los campos cultivados únicamente con soja. El ingreso neto aumentó 30% en el primer caso y 35% en el segundo.
Bojanich indicó que el rendimiento de cada cultivo en intersiembra cae hasta 30%, pero el uso de menores cantidades de insumos como herbicidas y fertilizantes permiten un mayor ingreso por hectárea. Por el momento sólo algunos grandes productores han incursionado en la intersiembra pero se cree que tendrá un desarrollo importante por lo cual las empresas del sector están desarrollando productos específicos. La firma BASF lanzó un nuevo herbicida llamado Interfield, que se aplica en en post emergencia temprana del maíz o girasol clearfield, tiene un efecto prolongado sobre el control de las malezas y permite la siembra de soja a los 15 días de aplicado el producto. Bojanich señaló que falta conocimiento sobre el uso de la intersiembra y una mayor producción de maquinaria agrícola específica para estos cultivos pero, aún así, estimó que en 5 años habrá 1 millón de hectáreas sembradas bajo este sistema.
