Shi Ke Rong parece el protagonista de una de esas películas posmodernas del nuevo cine chino. Alto, elegante y juvenil, pocos sospecharían que este joven empresario de sonrisa agradable fue uno de los nombres que se mencionó como responsable del audaz default de los multimillonarios contratos de soja que protagonizó China hace apenas dos años y que hizo temblar el precio mundial de este comoditie.
En mayo del 2005 China decidió unilateralmente desconocer los contratos por compra de soja que había celebrado antes, ante la drástica caída del precio de la soja, lo que los ponía en la incómoda situación de pagar por esta oleaginosa mucho más que su valor de ese momento. Claro que había contratos firmados y en el reducido numero de los grandes jugadores de este negocio no se registraban antecedentes de un desconocimiento de los precios pactados.
China apeló a la supuesta presencia de granos contaminados con agroquímicos no permitió que barcos repletos de soja provenientes de Brasil desembarcaran la mercadería. Inmediatamente el precio del poroto se derrumbó, y luego del esperado escándalo internacional, los chinos lograron su cometido: renegociar el precio pactado.
âEsta empresa china que se asoció a Macri está mencionada como una de las responsables de aquel default , incluso me comentaron que todavía tienen juicios en Londresâ, confirmó a El Federal un muy importante jugador del negocio sojero.
Miedos
Lo cierto es que el ingreso de este gigante al Belgrano Cargas de la mano de Franco Macri, encendió luces de alerta en los grandes procesadores del poroto de soja, que realizan el denominado crushing, es decir la elaboración de aceite y harina , que mayormente están ubicados en los puertos de Rosario y Santa Fé.
Empresas como Cargill y Bunge, que lideran el polo aceitero más eficiente y moderno del mundo, temen que con la ventaja de contar con un transporte propio y subsidiado , este grupo chino aumente considerablemente las toneladas de poroto de soja que exporta, para procesarlo directamente en China, reduciendo los volúmenes de la industria local.
En el 2003, se conoció un informe del USDA, la oficina de agricultura del gobierno norteamericano, que estimó la posible evolución global del negocio agropecuario hasta el 2012. Allí se evalúa que âla política de China es expandir su capacidad de crushing, en vez de importar aceite y harina de sojaâ.
âLa capacidad de molienda local es de 44 millones de toneladas (tn), y con las inversiones en marcha va creciendo. El año pasado se exportaron 10 millones de tn de poroto de soja sobre una producción total de 42 millones de tn. Si eso se acentúa con la capacidad de transporte que van a alcanzar con el Belgrano Cargas, la industria se va a quedar con una capacidad ociosa que va a afectar seriamente su rentablidadâ, explicó una fuente del sector.
En rigor, los industriales temen perder la cosecha de poroto de soja del noroeste argentino, en particular la de Santiago del Estero, Tucumán y la creciente Salta, que con un Belgrano cargas revitalizado llegaría rápidamente a los puertos de Santa Fe y de allí a China.
Desde la operadora del Belgrano Cargas (ver recuadro) le quitan dramatismo al asunto. âHoy en su deteriorado estado actual el tren transporta 500.000 mil toneladas por año, si hacemos todo bien en cuatro años vamos a estar en las tres toneladas con suerte. Suponiendo que todo fuera para los chinos, no incide en el negocio globalâ, explica un vocero de la flamante operadora del denominado Tren de la Soja.
Los voceros, que insisten en destacar el valor de la âepopeya ferroviariaâ que implica la movida de Macri y sus socios por revitalizar el Belgrano Cargas, apuntan además que âla presencia en la sociedad de operadores cuyo negocio es el transporte y no la soja, garantiza que los chinos no van a tener una tarifa preferencial para su grano. Es más, nisiquiera le van a permitir hacer reserva de cargaâ, agregó la fuente.
Un plan chino
El simpático Shi Ke Rong visitó el país al menos cuatro veces en los últimos siete meses. Se entrevistó con el presidente Néstor Kirchner y su ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, con el secretario de Transporte Ricardo Jaime y con el gobernador de Santa Fe, Jorge Obeid, en otros gobernantes provinciales.
En estas reuniones, el titular de Hope Full Grain & Oil, demostró la vocación de estructurar una verdadera ruta de la soja en el país, que integre ferrocarriles y puertos propios.
Acompañado por Mariano Macri, vicepresidente de Socma y socio, a través de Sideco Americana, de Hope Full en la compañía Shima que administrará el Belgrano Cargas, se reunió con Fabio Arredondo, responsable del ente que administra el puerto de Santa Fe.
âEstamos empezando con los movimientosâ, dijo Shi Ke Rong al término de la reunió n y dejó en claro su interés por operar el puerto de Santa Fé. âSomos consumidores de soja en China y la Argentina es productora. Tenemos buena sinergia. Mi país es un gran mercado, con una población que crece a ritmo acelerado. China representa una alianza que puede incentivar a la economía argentinaâ, sedujo Shi ke Rong.
Incluso este grupo se mostró interesado en participar de la construcción del tren rápido que el kirchnerismo imagina para unir a Buenos Aires, Rosario y Córdoba y que demandará una inversión estatal de al menos 500 millones de dólares. Aunque en este caso, el caballo del comisario parece ser la francesa Alstom que ató excelentes relaciones con el secretario de Transporte, Ricardo Jaime.
Más allá del fallido anuncio oficial del año pasado sobre una supuesta ola de inversiones chinas, lo cierto es que con sus tiempos milenarios y paciencia infinita, los hombres de negocios de la que dicen terminará siendo la principal potencia de este siglo avanzan en el país.
Los ejecutivos de Shi Ke Rong trabajan por estas horas en las oficinas del grupo Macri en la calle Della Paolera, donde ajustan sus planes para dominar la comercialización, el transporte, y la exportación de soja hacia su tierra natal.
Por Ignacio Fidanza
Nota Publicada en la revista El Federal 119
