Las estratégicas lluvias del fin de semana también contribuyeron a la tendencia negativa en las cotizaciones.
Por su parte, los precios internos de trigo para 2007 se mantuvieron en los niveles del viernes, âpero llamó la atención que actuaran menos exportadores y que no se consiguiera colocar mercadería más allá de febreroâ, sostuvo Carlos Boglioli.
El consultor de Roagro calificó al mercado de âenrarecidoâ, aunque reconoció que esta impresión âpuede ser un tanto subjetivaâ.
Boglioli recordó que hace varios días que no aumentan las Declaraciones Juradas al Exterior de trigo nuevo, âtema que tanto polvo había levantado, sin encontrarse respuestas adecuadas para justificarloâ.
Después de consultar algunas fuentes, desde Roagro no descartaron la posibilidad de la existencia de âalgún tiro por elevación de parte del gobierno, sugiriendo acompasarlas (o no oficializarlas), para evitar tener que adoptar alguna medida tan tempranera como antipáticaâ.
De todas formas, para Boglioli lo que sí fue evidente durante la semana pasada fue la agresividad interna para originar el trigo necesario para cubrir esas ventas, hecho que generó aumentos de precio sorprendentes: el trigo nuevo cotizó a $355 y el actual apenas llegó a $330.
Pero, para el consultor, hay otro otro punto que no terminaría de cerrar y es el hecho de que continuaron declarándose ventas de trigo viejo al exterior, âconvalidando los mínimos oficiales, elevados por decreto, precisamente para frenarlasâ.
En estos caso, los pocos exportadores que compran esta posición, âprácticamente ponen el precio a su agrado y todo hace suponer que ello les permite compensar aquella diferenciaâ, denunció el consultor, para inmediatamente después preguntarse ¿cuánto costaría el trigo de haber quedado suelto?.
âAlguien se preguntaba si quizá, esta supuesta “armonía” entre los exportadores y el gobierno, tan distante a la del gobierno con los productores, no podría tener en algún momento su compensación. Todo sea por la canasta familiarâ, deslizó Boglioli.
Oficialmente, hay 3.300.000 toneladas declaradas de trigo nuevo, contra compras internas que rondarían los 2.000.000.
En este contexto, los vendedores âliteralmente están asustados: u$s 115 no alcanzan a contrarrestar el dolor por lo que se empezó a vender arriba de los u$s 100, cuando se pensaba que ya era un nivel apetecible. Si la cosa se enfría, se viene una etapa de contracción de negocios, excepto que alguna buena lluvia pueda reactivarlos por breve tiempoâ, enfatizó.
En el caso del maíz, se cerraron operaciones a la vista por $265 con descarga y por u$s 85 para marzo.
La soja en el disponible se cotizaba a $515 y a u$s 170 para abril.
