El secretario Miguel Campos está dispuesto a avanzar con el plan ganadero, independientemente de los comentarios que reciba de las entidades a las cuales se les circuló los lineamientos del plan. “Apuntamos a arrancar en la primavera con el apoyo en materia de reproducción e inseminación”, dicen en el entorno de asesores del funcionario, considerando que recién el próximo otoño podría implementarse la componente relacionada a pasturas y oferta forrajera en general.
El costo previsto para implementar este plan es de $ 217,2 millones por año, de los cuales $ 174,5 millones se destinarán a un programa denominado Cambio Ganadero, similar al Cambio Rural que impulsara el hoy gobernador Solá, para el Inta, cuando fue secretario de Agricultura.
De ese monto, $ 87,2 millones serán aplicados a la sanidad y reproducción, mientras que $ 63,2 millones se dirigirán a incrementar la oferta forrajera, y $ 23,5 millones corresponderán a la asistencia técnica propiamente dicha. “Estamos planteando que los productores recibirán un apoyo económico no retornable, no solamente la asistencia técnica”, aseguran los asesores del titular de la cartera agropecuaria.
La idea es que los productores -el plan apunta a llegar a aquellos que tengan menos de mil cabezas- se integren al programa y reciban el asesoramiento profesional por un lado, pero que por el otro desarrollen un plan de mejoramiento, de forma tal que un porcentaje de esa inversión será subsidiado por el Estado.
“El borrador de la norma ya está redactado y tenemos el visto bueno de la ministra Miceli, con lo cual vamos a empezar lo antes posible”, aseguran.
Por lo pronto, se espera realizar una consulta con los gobiernos provinciales, ya que hay unos $ 18 millones destinados a reforzar los planes ganaderos que las provincias han ido lanzando.
