El 2006 puede ser la revancha, tras dos campañas consecutivas de baja producción debido a las inclemencias del tiempo, tales como las heladas y sequía que llevaron el 50% de su producción, siendo ésta quizás la oportunidad de poder salir de la difícil situación económica que atraviesan los productores.
El año pasado, la comercialización fue fluctuante, llegándose a pagar una tonelada de poroto blanco alrededor de 600 dólares; de poroto negro, 400 dólares, y de colores, 370 dólares, aproximadamente, estimándose que para esta campaña los mismos pueden llegar a mayores valores.
En este momento, tras haber finalizado las labores de siembra en el mes de marzo, las plantaciones presentan un buen desarrollo y una excelente calidad, gracias a las lluvias que han favorecido a la mayor parte del área sembrada, aunque en algunas zonas, tales como el norte de Salta, el exceso de las mismas provocó grandes pédidas.
Cabe destacar que para esta campaña se han sembrado solamente en Jujuy y Salta más de 180 mil hectáreas entre porotos negros, blancos y de colores, aunque en los últimos años el área sembrada fue disminuyendo debido al impacto de la soja.
Jorge Gurrieri, productor y comercializador de legumbres del NOA, expresó: “Venimos de un año que no fue muy bueno desde el punto de vista climático, pero en esta campaña tuvo un buen acompañamiento en el régimen de lluvias, lo cual nos proporcionó un gran aliciente en el terreno agronómico y fundamentalmente con el tipo de siembra que se realizó, directa y con cobertura”.
Además, Gurrieri afirmó que “no existen stocks en los principales países compradores, como España y Brasil, ni tampoco hay en existencia en nuestro país, lo que nos permite arrancar con una campaña limpia, es decir con cero stock”.
Con respecto a la incorporación de tecnología señaló que “el accionar de los productores es bueno, ya que a pesar de no estar en un buen estado financiero, con mucho esfuerzo y sacrificio continúan apostando a esta importante actividad regional, y eso se nota en la renovación de maquinarias que vienen realizando año tras año, para mejorar sus rendimientos.
Martín Llanos
Especial para Infocampo
