En los Estados Unidos, los frigoríficos están obligados a informar al Dto. de Agricultura dos veces por día cuánta hacienda compraron, a qué precio y de qué calidad. El organismo acopia y procesa esa información y luego la publica.
Anterior a la sanción de la ley, en 1999, el suministro de información era voluntario. Esto permitió pasar del 60% de captura de datos sobre las operaciones del mercado al 90%.
En la Argentina, el jefe de gabinete Aníbal Fernández lanzó recientemente la idea de un sistema de información electrónico que reemplace al del Mercado de Liniers.
El antecedente más próximo es el sistema que en 2005 creara la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario, para los precios del cerdo, con el apoyo de los productores.
Los frigoríficos que faenan cerdos deben informar semanalmente volúmenes y precios pagados por la hacienda. Es una declaración jurada que luego se cruza con las facturas de compra.
Así se logró pasar de un índice de referencia elaborado a partir de 8.000 cabezas por semana a otro que considera entre 25.000 y 30.000. La consecuencia fue que el mercado se transparentó y los precios subieron (¡tal vez no sea lo que hoy quiere el Gobierno!).
Pero llevar este esquema de los porcinos a los bovinos tiene sus bemoles, por varias razones:
a) La faena porcina es de unas 2,5 millones de cabezas al año. La de bovinos, de 14,2.
b) El año pasado, en vacunos operaron 495 plantas o mataderos, mientras que en porcinos, 163.
c) La faena de cerdos está altamente concentrada: 19 plantas representan el 80%. La de mayor volumen, Pompeya, faenó el 23%. En cambio, la de vacunos se encuentra atomizada. Para llegar al 80% hay que juntar 107 plantas. La que más faena, Rioplatense, sólo tiene el 2,3% del total país.
d) Los ganaderos están acostumbrados a manejarse con información diaria, por la volatilidad del mercado. Están pendientes de cuántas cabezas entraron en Liniers y cómo está la demanda esa mañana. Eso genera variaciones importantes.
En cambio, si bien todos los días hay precios de porcinos, la información circula en forma semanal. Son diferencias a tener en cuenta en la planificación de un sistema electrónico de información.