El titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, apoyó ayer la decisión del Gobierno de frenar por seis meses las exportaciones de carne vacuna “en beneficio del bien general y para contener la tendencia alcista en la inflación”.
Buzzi consideró que “es cierto” que la medida desincentiva la inversión en el sector ganadero y plantea a futuro una reducción en el número de cabezas en el país. Asimismo, el ruralista dijo: “Estamos de acuerdo con lo que hizo el presidente (Néstor Kirchner), porque primero está el bien general”. Tras apoyar la medida Buzzi aseguró que “si seguía la trepada de los precios de la carne que tanto impacta en los índices de inflación, en marzo la cosa iba a ser mucho más complicada”. Buzzi estimó que la restricción resulta “contradictoria” cuando hace un mes se debatía la problemática que presentaba el frente externo por la aftosa. “Es también una contradicción -dijo- que un país que plantea obtener un superávit comercial y fiscal resigne más de mil millones.”
Por otra parte, Silvia Giusti, senadora que preside la comisión de Agricultura, indicó: “Podrán calificar de drástica la medida, pero yo digo que fue absolutamente acertada. Ahora sí: ningún argentino llegará a la góndola sin poder llevarse su corte vacuno a un precio razonable. Continuar exportando es posible, sólo si los empresarios del sector se disponen a pensar primero en sus compatriotas”.
