El lector se estará preguntando cómo planteamos el tema de cama de siembra en plena época de cosecha gruesa en nuestro país. Estamos cuerdos, ocurre que durante la época de cosecha en los planteos de siembra directa en nuestro país estamos conformando la cama sobre la cual se implantará el próximo cultivo.
De allí que se requiere actuar de determinada manera para que no haya problemas durante la siembra y emergencia de las próximas plantas que se desarrollarán en el mismo lote ya que en definitiva las deficiencias después se traducirán en una merma en el rendimiento final. Se debe tener especial cuidado con el tránsito sobre el lote, que debe ser mínimo. Aconsejamos efectuar un análisis sobre todas las máquinas y vehículos que se encuentran involucrados en la tarea de cosecha y clasificarlos de acuerdo con su potencial de compactación. Esto se logra analizando su peso, la presión de inflado de los neumáticos y la superficie de apoyo.
De esta manera se podrá evitar pasar innecesariamente varias veces por el lote. Hemos realizado experiencias en establecimientos agropecuarios pintando una señal con colores amarillo, rojo y verde para identificar claramente los vehículos y máquinas problemáticos desde el punto de vista de la compactación.
Con respecto a la situación del suelo tendremos en cuenta que presenta su máxima susceptibilidad a la compactación en capacidad de campo en el momento en que se nota esponjoso.
Otro aspecto importante es la distribución uniforme que realice la cosechadora de la paja y granza, esto se hace más crítico en cultivos como el maíz de alto rendimiento. Si el material queda acumulado en verdaderas hileras en el campo esto dificultará la labor de las sembradoras. En el caso de coincidir las líneas de siembra con el sentido de la cosecha se notarán sectores donde existirán problemas de enraizamiento, emergencia y agarre de los cultivos. En los casos donde no se realice en dicho sentido coexistirán en la misma línea plantas que arrancarán en forma despareja y se afectará el rendimiento.
La solución a este problema es la utilización en las máquinas cosechadoras de triturador y desparramador que logre una uniforme distribución del material sobre el suelo a lo largo de todo el ancho de la máquina. En este sentido el permanente crecimiento en los anchos de los cabezales implican un reto creciente ya que la distancia a cubrir es cada vez mayor y de allí el tamaño y potencia de los equipos necesarios.
Jorge Hilbert
Especial para Infocampo
