En el marco de la relación bilateral desarrollada entre la Argentina y Venezuela, la Secretaría de Agricultura y el INTA viajaron esta semana junto a las principales empresas de maquinaria agrícola con el objetivo de presentar a empresarios y funcionarios del país caribeño las fortaleza de la industria nacional.
Se analizarán las condiciones arancelarias y de financiación para desarrollar el proceso exportador y concretar misiones técnico-comerciales de productores, importadores y funcionarios venezolanos hacia la Argentina en los próximos meses, como también recabar información y capacitación para futuras misiones.
Con esos objetivos en vista, están previstas reuniones con el gobernador de la provincia de Barinas, funcionarios de la provincia de Guárico, bancos locales e importadores, además de visitas a establecimientos agrícola-ganaderos.
Sembradoras, equipos forrajeros, cosechadoras, pulverizadoras y equipos de riego, son algunas de las herramientas que pueden ofrecer los fabricantes nacionales a los productores venezolanos.
La industria argentina deberá disponer de un financiamiento competitivo con respecto a Brasil, que es el principal proveedor de maquinaria en Venezuela. Durante el 2004 importó u$s200 M, de los cuales u$s100 M se compró a Brasil.
La delegación argentina, conformada por unas 30 personas, se integró con fabricantes de sembradoras, cabezales, cosechadoras, niveladoras, fertilizadoras, silos, embolsadoras, tolvas, tractores y acoplados, quienes junto con funcionarios del INTA, se reunirán con gobernadores, autoridades, bancos e importadores del país centroamericano.
Por el INTA viajó el director del Proyecto Nacional de Eficiencia de Cosecha y Poscosecha de granos, Mario Bragachini. Vasalli Fabril, Maizco, Bernardín, Ombú, Giorgi, Yomel, Agrometal, Akron, Pauni, Marani Agrinar y Metalfor, son algunas de las empresas que enviaron representantes a la misión.
Desarrollo. En los últimos cinco años Venezuela importó u$s1.500 M en el rubro maquinaria. La producción agrícola de Venezuela representa menos de 10% del PBI (de u$s97.300 millones de dólares en el 2003) pero detenta un gran potencial no aprovechado.
No obstante, su gobierno, encabezado por Hugo Chávez, tiene la firme convicción de plasmar el crecimiento en forma decidida y acelerada.
En este contexto, resulta importante que los empresarios agrícolas argentinos mantengan una acción de promoción constante en la que se pueda combinar una oferta con calidad, financiamiento y facilidad de acceso.
El Instituto Nacional de Investigación Agrícola venezolano, que trabaja, por ahora sólo en investigación, pretende desarrollar un sistema de extensión como el INTA.
Juan Ignacio Martínez Dodda (jdodda@infobae.com)